Aunque hay un par de cosas interesantes, no es la mejor cosecha de los últimos tiempos.
Películas
Mula.
Este hombre sigue haciendo cine ¡con 89 años! No es desde luego su mejor
película, pero es una película digna. Bien dirigida, con ese ritmo y esa
fotografía tan de Eastwood y muy bien
interpretada, sobre todo por él. Quizá le sobren unos minutos, porque en la
parte central se hace algo premiosa, y sea un tanto previsible, pero resulta
entretenida y toca temas interesantes.
La
caída del imperio americano. Otra buena película del director
canadiense de Las invasiones bárbaras.
No tan potente como esta, pero sí suficientemente interesante y, desde luego,
muy entretenida. A mitad de camino entre la comedia y el cine policíaco, con
buen sentido del humor en algunas escenas y, como corresponde a este director
que también ha escrito el guion, con una dura crítica a varios aspectos de su
sociedad.
La
profesora de parvulario. Resulta que es un remake de una
película israelí de hace cinco años que vi y de la que comenté lo siguiente en
el blog: “Un drama israelí en el que no resulta
fácil comprender las actitudes de su protagonista. Tuvo críticas bastante
positivas, pero me pareció aburrida y con un guion muy mejorable.” Esta vez no
me he aburrido aunque desde luego el guion deja demasiados cabos sueltos y
sigue siendo difícil entender las motivaciones de la protagonista que, eso sí,
está magníficamente interpretada.
Lo dejo
cuando quiera. Una de las pocas veces que veo una película española. En
este caso se trata de la versión española de una italiana. Un guion bastante
bien construido y algunos gags con los que me he reído hacen que no me
arrepienta de haberla visto. No está mal para pasar un rato.
Pájaros de verano.
Interesante película colombiana sobre cómo una comunidad indígena se vio
inmersa en el tema de la droga desde los años sesenta y cómo esto la cambió
completamente. Dividida en cinco partes vemos la evolución desde 1968 hasta
1980. En muchos momentos parece casi un documental de antropología ya que muestra
las ideas y los rituales de la comunidad. Ritmo pausado y hablada casi
exclusivamente en la lengua wayuú de la comunidad por lo que está subtitulada
en castellano.
Otro tipo de cine que merece la pena
conocer. Está basada en hechos reales.
Series
Atlanta. Dos
temporadas de 10 y 11 episodios respectivamente y una duración algo inferior a
los 30 minutos. Mitad comedia, mitad drama, refleja el mundo de los
afroamericanos en esa ciudad y el racismo que aún persiste. Mejor la primera
temporada ya que en la segunda se dedican a hacer monográficos de cada uno de
los personajes y resultan bastante irregulares. Me gusta más cuando están todos
en acción en el mismo capítulo. En general es una serie recomendable. Ha tenido
magníficas críticas en Estados Unidos.
Press.
Es una pena que esta miniserie británica tenga solo seis capítulos. Soy un
apasionado de las series, y las películas, que tratan el tema del periodismo.
Además, en esta el tema central es el enfrentamiento entre dos formas de
entender la profesión y el tratamiento que hay que dar a la información. Más
allá de algún momento y de algún personaje un tanto maniqueo, la serie retrata
cosas que, desgraciadamente, se ven casi a diario y no solo en la prensa
escrita. Muy entretenida. Espero que haya más temporadas.
You.
Serie norteamericana de 10 episodios de 45 minutos. Es en parte un thriller
psicológico, pero contiene también elementos de comedia romántica. Bastante
entretenida aunque desfallezca en algunos momentos. Cada capítulo se inicia con
unas extraordinarias vistas de Manhattan que animan a viajar allí. Dos buenas
interpretaciones.
The
good fight. Serie norteamericana de diez capítulos en esta
primera temporada. Ha tenido muy buenas críticas, pero no me ha convencido. Es
cierto que resulta por lo general entretenida,
pero le sobra histrionismo en bastantes personajes y le falta algo más de
relevancia en los temas jurídicos. No me animo por ahora a la segunda temporada
porque he visto que estos defectos no solo no se corrigen sino que aumentan.
This
is us. Esta
tercera temporada de esta serie norteamericana me ha resultado un tanto pesada
y reiterativa. Han seguido con los temas de las anteriores, pero sin
prácticamente avanzar más allá de buscar cómo podía estar presente un padre ya muerto.
Además, en varios capítulos las escenas duraban casi lo que un videoclip. Tiene
algunos buenos momentos aunque creo que ya está agotada la idea. No obstante,
tal y como es el final seguramente habrá más temporadas.
Bordertown
(Sorjonen). Es la primera serie finlandesa que veo
y está en la línea de las series nórdicas en muchos aspectos, aunque me ha
parecido un poco inferior. Son diez episodios en los que hay cuatro casos para
resolver a los que dedican dos o tres
capítulos. Un peculiar policía, Sorjonen, trabajando en una zona del país que
hace frontera con Rusia por lo que aparecen varios personajes de esa
procedencia. Entretenida aunque alguno de los capítulos sea algo aburrido.
Buena ambientación.
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