Uno más de los millones de blogs,¿ por qué hacerlo entonces? Para comunicar algunas cosas, eso sí, sin grandes pretensiones. Lecturas, músicas, películas,TV, ...elementos de los andamios con los que se va configurando nuestro pasar por la vida y que la hacen más atractiva. Y también, por qué no hacerlo, algunas impresiones y/o reflexiones y/o opiniones sobre la actualidad. El autor: Un exprofesor de Geografía e Historia de secundaria con varias aficiones y sin ninguna especialización.
domingo, 29 de septiembre de 2013
Artículos interesantes
Buena reflexión y relación de temas por Soledad Gallego.
Muy interesante Javier Cercas citando, además, a varios de mis autores favoritos.
Muy interesante Javier Cercas citando, además, a varios de mis autores favoritos.
sábado, 28 de septiembre de 2013
Leída de un tirón


Tres películas y cinco novelas con menos de 40 años
avalan que esta autora debe de tener algo especial. Y, efectivamente, lo tiene.
Es difícil que se te ocurra la idea de relatar la huida de Mengele a través de
la Patagonia hasta Bariloche acompañando a una familia argentina, pero es que,
además, lo relata de una forma que hace que no quieras dejar el libro en ningún
momento; te atrapa la historia, te inquietan los personajes y no sabes por
dónde pueden seguir aunque sepas, la propia autora lo dice en un momento de la
novela, el final del propio Mengele.
No había visto ninguna de sus películas por cierto que
una de ellas, XXY, tiene varios
premios, ni leído ninguno de sus libros, pero espero colmar esa que desde hoy
considero una laguna.
Tiene para mí además el aliciente de que habiendo
estado hace muchos años en Bariloche, a lectura de la novela me ha recordado
mucho de los lugares que visité.
Recomendable lectura. Para quienes quieran saber más
de su obra dejo el enlace a un artículo reciente en Babelia.
Lucía Puenzo, Wakolda.
Una historia de seducción
jueves, 26 de septiembre de 2013
Sobre los problemas de la educación en Baleares


Profes
Entrar en el aula para dar una clase se parece a pisar un
escenario o atender un cliente. Es un reto, una aventura, un riesgo. Con
algunas diferencias: el profe o la profe repite este desafío hora tras hora,
día tras día hasta convertirse en algo cotidiano. No hay glamur estético ni
excitación yuppie en una actividad sometida a la tiranía de la puntualidad del
horario. Y sin aplausos al final de cada actuación ni la ganancia de una
comisión al cerrar cada operación. Es más, la clase a veces se desarrolla
contra la indiferencia y la hostilidad de los clientes que son los alumnos. Eso
cuando los padres no descargan su enfado porque sus hijos no progresan como
debieran, o en la prensa se tilda a los profes de vagos por los dos meses de
vacaciones. A cambio, el estímulo de intentar abrir la mente del niño, reforzar
su autoestima, respetar juntos el entorno humano, cultural y físico. Formar
ciudadanos responsables y libres. Con el ejemplo, y lejos de los focos, en
medio de la tensión que supone coordinar 25, 30 o 40 chicos distintos
intentando formular el mejor argumento en tiempo real, los profesores se hacen
fuertes. Pocos colectivos además del sanitario habrán mantenido una huelga como
la actual, que no contiene reivindicaciones económicas sino principios, ideas,
valores. Una lección viva y cara. Una respuesta digna a la indigna acusación de
ser los causantes del fracaso escolar. Sí, he tenido suerte en la vida. Me
gustaba la política pero me hice profesor. La profesión más bella del mundo.
Emili Gené
He reproducido tres artículos aparecidos en los últimos días en el diario última Hora por el gran interés que tienen para comprender lo que está pasando en Baleares.
Además, en uno, el de Miquel Segura, se menciona a alguien que fue alumno mío hace unos veinte años y uno de los mejores alumnos que he tenido nunca. El tercero está escrito por un grandísimo amigo y compañero algún año que ha tenido el gesto valiente de dimitir de su cargo de director del IES Ramon LLull.
Emili Gené
He reproducido tres artículos aparecidos en los últimos días en el diario última Hora por el gran interés que tienen para comprender lo que está pasando en Baleares.
Además, en uno, el de Miquel Segura, se menciona a alguien que fue alumno mío hace unos veinte años y uno de los mejores alumnos que he tenido nunca. El tercero está escrito por un grandísimo amigo y compañero algún año que ha tenido el gesto valiente de dimitir de su cargo de director del IES Ramon LLull.
miércoles, 25 de septiembre de 2013
Debe de ser muy bueno, pero...


Si tuviera que resumir en una idea lo
que me ha supuesto la lectura de este libro diría que se puede comparar a subir
en una montaña rusa; vas subiendo despacio, premiosamente hasta una cima desde la
que caes en picado con la angustia y la descarga de adrenalina para volver a
subir de nuevo y caer y…
Realmente sólo hay dos momentos en los que
he “caído” y, desgraciadamente, mucho en los que he subido. Puede que, como se
dice en uno de los comentarios de la obra que enlazaré al final, se trate de la
construcción de un gran edificio, pero también es cierto, como se dice en el
otro comentario que enlazo, que resulta extraordinariamente aburrida en muchos
momentos.
Con Roth ya tuve una mala experiencia con
La conjura contra América que me
pareció inmensamente aburrida. Ahora, reconozco que la experiencia no ha sido
tan negativa, pero me sigue pareciendo que, como tantos otros autores estadounidenses
sobre todo, escriben y escriben y escriben contando todo de todo, pero sin
llegar a profundizar. Realmente, después de más de 500 páginas hablando del
mismo personaje protagonista termino sin saber muy bien las verdaderas motivaciones
de algunos de sus comportamientos. Lo mismo me pasa con el personaje de su
hija.
Más de una vez he dicho en el blog que
no soy lector desde hace tiempo de literatura ni anglosajona ni española. Lo
fui hace años pero poco a poco las he ido abandonando por la de otras
procedencias. Pues bien, los últimos intentos con la española me han salido
bien, con la otra no. Seguiré intentándolo.
Philip Roth, Pastoral americana
martes, 24 de septiembre de 2013
Un clásico sobre la Guerra civil


Se puede decir que era imperdonable que
alguien que, como es mi caso, ha leído
decenas de libros sobre la Guerra Civil entre ellos muchos de memorias, no
hubiese leído éste. Tenía desde hace años la edición en catalán hecha en 1969,
pero no me había animado a leerlo en esa lengua. Este años apareció esta
edición en castellano y, al fin, lo he conseguido.
He de decir que no me ha defraudado aunque
también es cierto que conociendo el tema tampoco me ha aportado muchas
novedades.
El libro consta de tres partes. En la
primera, narra su estancia en el frente de Aragón, en Huesca, en una unidad de
las milicias del POUM; en la segunda, tras resultar herido, vuelve a Barcelona
donde presencia los enfrentamientos de mayo del 37 y, en la tercera, explica en
dos anexos su visión de la situación política del momento y los distintos
conflictos.
A pesar de que no es la primera vez que
leo relatos de participantes en una guerra, me ha gustado mucho la primera
parte. Tiene interés porque ayuda también a comprender alguno de los porqués perdió
la guerra el bando republicano. Lo mismo sucede con los anexos sobre todo con
el primero.
Orwell es un buen narrador y también un
buen analista. Teniendo en cuenta que escribió el libro unos meses después de suceder
lo que en él se cuenta, tiene mucho mérito la acertada versión que da de los
hechos y sus interpretaciones.
Tras su lectura he pensado que es una
pena que desde el otro bando nadie fuera capaz de escribir textos así de
críticos y, en este sentido, me ha recordado otro de los grandes libros de
memorias en la misma línea de crítica como es la Guerra y vicisitudes de los españoles del socialista Julián
Zugazagoitia (fusilado después por el bando franquista).
Libro muy recomendable para interesados
en ese conflicto o en las guerras. en general
George
Orwell, Homenaje a Cataluña
lunes, 23 de septiembre de 2013
Artículos interesantes
Soledad Gallego habla del debilitamiento del Estado de bienestar a partir de la declaración del gobierno holandés.
Josep Ramoneda trata muy acertadamente sobre el presidente del constitucional.
Mario Vargas Llosa critica el derecho a decidir y cómo están tratando el tema de Cataluña desde una posición, como es la suya, muy crítica del nacionalismo, en este caso del catalán. Tengo que decir que estoy de acuerdo en su posición ante cualquier nacionalismo, sin embargo, creo que comete errores al hablar de éste en concreto.
viernes, 20 de septiembre de 2013
Apoyando a mis excompañeros
Los
profesores, la gente que se dedica a la enseñanza, suelen ser, por lo general,
gente tranquila, educada, sensible, preocupada por cómo funciona el mundo,
profesionales entregados a su trabajo que es, además, el único en el que “el objeto transforma al
sujeto” (como decía una profesora que tuve de pedagogía), esto es, son unos
profesionales que están en constante transformación y formación, tanto
intelectual como, si me apuran, afectiva. Tienen que relacionarse a diario con
jóvenes de todo tipo, condición, educación, carácter, intereses, motivaciones,
etc. y, cada cierto tiempo, con sus padres que también son muy diferentes unos
de otros. Además, no sólo deben relacionarse sino que deben intentar que esa
relación sea fructífera para la otra parte (en el caso del profesional el fruto
está en el sueldo y en la satisfacción de la tarea cumplida).
A
estos profesionales en los años en que yo he tenido ocasión de compartir sus
esfuerzos y desvelos (pues yo también lo era), otros profesionales no siempre
tan atentos y conocedores de la realidad educativa como los propios profesores
les han ido cambiando las leyes la mayoría de las veces sin ningún tipo de
diálogo y, mucho menos, negociación: las horas dedicadas a cada asignatura, sus
contenidos, las formas de evaluar los conocimientos y de comunicarlos a los
padres, etc., etc, etc. Más: donde se hablaba de objetivos generales y
específicos, se pasó luego a hablar de objetivos conceptuales, procedimentales
y de valores y normas, para terminar hablando de competencias básicas; de
pronto dejó de haber exámenes en septiembre porque había que hacer evaluación
continua, luego volvieron estos exámenes. Más: de repente apareció la solución
a muchos de los males del sistema: la calidad,
pero entendida en un sentido burocrático, había que hacer bien los
papeles, había que controlar y anotar todo (cuaderno de clase del profesor,
porcentaje de asignatura impartida en cada período, solicitud de informes constantes bien
formalizados, valga la redundancia).
Y
los profesionales hicieron programaciones por los distintos tipos de objetivos
y de competencias, e informes para la
jefatura de estudios, para los padres, para la inspección educativa, para los
tutores de sus grupos, para su jefe de departamento, para… (en algún lugar
dirían para María Santísima). Hicieron y hacen, con más o menos convicción,
pero sin protestas, sin huelgas, sin manifestaciones por lo irrelevante e
inútil de muchas de las cosas burocráticas que tienen que hacer.
Como
todos los funcionarios han tenido cuatro o cinco congelaciones salariales e
incluso un par de reducciones. Nada, “ajo, agua
y resina…”
Resumiendo.
Apenas se ha contado con ellos para aprobar e implantar un conjunto de medidas
que, supuestamente, mejorarían la calidad de la enseñanza y permitirían
abandonar esos últimos lugares que el país obtiene en los informes Pisa.
En
los dos últimos años, otra vuelta de tuerca. Aumento de las horas lectivas (no
especialmente traumático) y, sobre todo, del número de alumnos en clase que no
hace falta ser profesor para comprender que no mejorará, sino todo lo
contrario, el rendimiento de los alumnos. Y, en el caso de Baleares, el TIL,
esto es, el segundo intento de ir disminuyendo y, si pudieran algunos,
desterrando el catalán del sistema educativo. Esta medida la toma un gobierno
del mismo partido que puso en marcha la Ley de Normalización Lingüística en
vigor. Un TIL que es lo único que dicen que no están dispuestos a negociar
seguramente porque se trata, como dice el periodista Matías Vallés, del
Tratamiento Ideológico de lenguas.
En
este contexto ha estallado un conflicto de difícil resolución precisamente por
el carácter ideológico de la propuesta. Los profesores que han padecido esta y
anteriores administraciones educativas con paciencia y, en mi opinión, excesivo
estoicismo los han perdido entre otras cosas por el inadmisible argumento, por
tan descaradamente falaz, de que con el TIL disminuirá el fracaso escolar.
Sirvan
estas apresuradas líneas, antes de salir hacia Madrid, para manifestar mi apoyo incondicional a mis
excompañeros y para desearles suerte en una batalla tan difícil de ganar.
El 29 nos vemos.
lunes, 16 de septiembre de 2013
Pequeña gran novela


Pequeña gran novela porque, efectivamente, en tan solo
141 páginas el autor nos muestra todo un mundo, el de las prostitutas en la
ciudad de Novi Sad empobrecida tras la posguerra y, sobre todo, lo hace de una
forma extraordinariamente sugerente. Huyendo del más sórdido realismo, pero sin
eludir la realidad; sin moralina de ningún tipo.
Son varias las mujeres, verdaderas protagonistas de la
novela, que aparecen en sus páginas. En su mayoría seres normales y corrientes
con sólo algo en común: la necesidad de subsistir. Algunas casadas que
aprovechan la ausencia de su marido, otras acogidas en una casa con una “patrona”,
otras a las que el paso del tiempo está dejando fuera del “mercado”. Seres humanos
tratados con mucha ternura por Tisma que logra crear, y creo que es el gran
acierto de la novela, una atmósfera urbana muy particular.
Muy recomendable. Me parece que he descubierto a un
nuevo autor de gran interés y con varios libros publicados por la misma
editorial.
domingo, 15 de septiembre de 2013
Últimas entradas hechas en facebook
Es la primera vez que hago esto, pero me ha parecido bueno ponerlo en el blog porque reflejan mis opiniones, y mi mala leche, de los últimos días ante una serie de acontecimientos relevantes. He preferido hacer un Andamio más personal y poner los temas más "ideológicos" de esta manera.
Por cierto, hablando de cine, La gran familia española, a pesar de las buenas críticas, es bastante bodrio.
Ana Botella está recogiendo el fruto de la
animadversión que ha ido generando con su sonrisa cínica y despectiva y con su
desagradable carácter público (en privado, con su Jose, no sé cómo será).
Artur Mas ya habla, antes de celebrarse, de que el 11
de septiembre habrá más manifestantes que
en la marcha sobre Washington. ¿Qué pretende decir, que los negros
tenían menos interés en sus derechos civiles que los catalanes en su patria, o
que él tiene más capacidad de convocatoria que Luther King? Hay gente que no es
más tonta no porque no practique, sino porque ya está en el límite.
Escuchar al ministro de exteriores decir que la
Constitución sólo tiene dos artículos, el 1º y el 2º, y que el resto es
literatura me lleva a plantearme dos cuestiones: 1. ¿De dónde sacan a este tipo
de personajes para ponerlos en puestos de tanta responsabilidad? 2. Si fuera
catalán, ¿dónde debería estar hoy? A pesar de mi antinacionalismo creo que
estaría en la cadena.
El govern negociando los servicios mínimos pide que
sean del 30% con lo que se conseguiría un “inicio normal del curso” y se
garantizaría el derecho a la educación. Si ambas cosa se pueden conseguir así,
¿por qué no echar al 70% restante y ahorrar un montón de euros?
Dios mío, y soy ateo, pero qué inútiles son algunos.
Por si acaso, El PSOE en Andalucía no basta con que
pase la escoba, debería pasar un aspirador industrial.
“José Ramón” Bauzà quiere reducir el número de
diputados un “30,5%” porque hay algunos que quieren ganar un sueldo sin
trabajar. Al mismo tiempo, afirma que en su grupo no hay ninguno en este caso.
Pues bien, los cinco diputados que menos han trabajado resulta que son del
grupo popular (con María Salom a la cabeza).
Por si acaso, El PSOE en Andalucía no basta con que
pase la escoba, debería pasar un aspirador industrial.
Aportación para
el diccionario de la RAE:
“Hacer un mariano”. Dícese de aquella actitud que consiste
en: cuando aparece un problema hacer como si no existiera, ni tan siquiera
nombrarlo, no dar explicaciones a nadie y, si fuese difícil evitarlas, enviar a
un subalterno; todo ello esperando que con el tiempo se solucione o se pudra.
Sinónimos: “hacerse el longui”, “hacerse el sueco”,
hacer de don Tancredo, etc.
En Cataluña la alternativa es: o reforma de la
Constitución o declaración unilateral de independencia.
González puede pasar a la historia entre otras
cosas por ser el señor X, Aznar como el
matonzuelo de las Azores, Zapatero como el que liquidó en tres años la economía
española y Rajoy como el nacionalista (español) que consiguió la independencia
de Cataluña.
Hacer una huelga es siempre una decisión difícil,
cuesta 100 euros al día y los tiempos no están para dispendios; si, además,
coincide con el inicio del curso cuando los ánimos y las fuerzas están íntegros
la dificultad aumenta; y, si tiene carácter indefinido y no hay reivindicación
económica de ningún tipo, se convierte en algo casi heroico. Así que, ánimo a
los huelguistas. Toda mi solidaridad y el deseo de que se consigan alguno de
los objetivos. Suerte.
Acabo de enterarme del acuerdo entre Rusia y Estados Unidos para evitar la intervención en Siria. ¿Qué dirán ahora tantos y tantos halcones españoles?¿Se lo achacarán a la cobardía de Obama por ser demócrata o, quizás, por ser negro? Veremos por dónde salen.
ANDAMIO
“Hoy los tiempos adelantan
que es una barbaridad…”
He sido durante 42 años un fumador empedernido. En los últimos años me fumaba dos paquetes de
Ducados y medio de Royal Crown que, al ser rubio, me permitía seguir fumando
cuando no me entraba ya más tabaco negro. Cuando viajaba en avión, nada más
apagarse la señal de prohibido fumar encendía un cigarrillo que tenía ya
preparado y que había estado moviendo nerviosamente. Si el que estaba a mi lado
no era fumador, pues que se aguantase, que no se hubiese sentado ahí. En el
hospital, esperando una operación de hernia discal, salía arrastrándome de
dolor de la habitación que compartía con otros cinco pacientes para echar un
cigarrillo en una ventana que daba a un patio interior. Era un verdadero
profesional y, además, me justificaba con aquello de que si me hacía daño era
decisión mía continuar, era mi vida. Resumiendo, visto desde la perspectiva
actual, era un auténtico, con perdón, gilipollas.
Llevo seis años sin fumar y aunque no soy un obseso
antitabaco, sí que me doy cuenta de cómo a pesar de que ya hoy se conoce bien
todo el mal que causa y de que existen formas de dejarlo más o menos buenas,
hay mucha gente que sigue utilizando mis argumentos e incluso el muy liberal,
ante las prohibiciones de fumar tan generalizadas, de por qué tiene que inmiscuirse el estado en
lo que yo haga. (Especialmente chocante cuando lo escucho de personas de
izquierdas.)
A pesar de todo lo dicho, cuando asisto a según qué
cenas con amigos me fumo un par o tres cigarrillos que me aceleran muchísimo y
que me demuestran palpablemente lo malo que debe de ser.
Tuve perro
dos veces. Un caniche en los últimos años de vivir con mis padres que, como es
habitual, se quedó con ellos cuando me marché de casa, y un bóxer que también dejó de vivir conmigo tras una
separación. A ambos bajaba a la calle para que paseasen e hiciesen sus
necesidades. Por supuesto, ni llevaba una bolsa para recoger las cacas, ni
evitaba que las hiciesen donde les pareciese mejor incluyendo el parque en el
que luego los niños jugarían. Nunca nadie me recriminó nada. Era otra época y
aún no se tenía conciencia de que hay comportamientos absurdos y muy
antihigiénicos.
Actualmente, la situación ha cambiado y mucho. Una
parte importante de los que tienen perro salen a pasear con su bolsita
correspondiente, pero sigue habiendo bastantes que no lo hacen así incluyendo
los que los llevan al parque donde juegan niños (mi hijo entre ellos). Un par
de veces hemos hecho la correspondiente queja ante el ayuntamiento, pero sin
obtener resultado lo que no deja de tener su lógica pues es muy difícil
perseguir esos comportamientos.
Saqué el carnet de conducir a una edad relativamente tardía, 27 años, para lo que hoy
se estila. Lo necesitaba para ir a trabajar y disponía del dinero de mis
primeros sueldos. Me compré un coche de “segunda” mano que luego resultó ser de
al menos “cuarta” con el que, a pesar de ser ya mayorcito, hice bastantes más
animaladas de las que hacen ahora los jóvenes con veinte años. Así: conduje
borracho en varias ocasiones llegando a subirme a la acera en alguna ocasión, o
a conducir sobre la línea de separación de los carriles para no salirme de la
carretera y ¡llevando a alumnos a su casa a altas horas de la madrugada!;
conduje varios kilómetros con una rueda pinchada sin pensar que esa podía ser
la causa de que la dirección se “torciese”; hice un viaje de Madrid a Almería
de noche parando a descansar en el arcén y ya de madrugada. Para qué seguir: un
desastre.
Hoy voy a veces por la carretera e insulto a esos
“jovencitos” que me adelantan a toda velocidad o a los que van por la calle
conduciendo en zig-zag.
Acabaré estos recuerdos/reflexiones con la playa y el sol. Cuando era joven pasé
bastantes horas en la costa de Tarragona, a pleno sol en las horas centrales del
día sin ninguna protección Tras la ducha
me ponía la nívea de lata azul y ya está. Cada año cambiaba la piel más de una
vez como las culebras.
Hoy prácticamente no dejo que me den los rayos del sol
y cuando veo a esos extranjeros negros como el betún no termino de entender
cómo quieren estar así con la información que hay actualmente sobre el cáncer
de piel.
Resumen y conclusiones.
He estado expuesto a más de un tipo de cáncer y a tener un grave accidente
de coche. No era demasiado consciente de lo que hacía; la sociedad tampoco lo
era y la permisividad era muy grande; escasas campañas de concienciación y ninguna
prohibición ni control. Hoy la situación es radicalmente diferente, pero sigue
habiendo mucha gente que no tiene en cuenta ninguno de los mensajes ni, a veces,
de las prohibiciones.
Al mismo tiempo, yo me he hecho muy quisquilloso y critico
con ganas las mismas actitudes que yo tenía. Seguramente es una muestra más de
que me estoy haciendo mayor, como el don Hilarión de la verbena, y de que, en el fondo, uno habla de la feria
según le vaya en ella.
Vivimos en una sociedad que cuida mucho mejor a su
gente y muchas veces no sabemos valorarlo.
Ha pasado tanto tiempo desde el último Andamio que he
visto bastantes películas que se pueden recomendar.
En plan sentimental:
Antes del anochecer que tras verla no he tenido más remedio
que conseguir Antes del amanecer y Antes del atardecer. He disfrutado mucho
con esa larga historia de amor en la que tanto se habla. Espero con paciencia,
habrán de pasar seis o siete años, una cuarta entrega.
El último cuarteto. Buena música, buenas interpretaciones y
sentimientos.
Una casa en Córcega. Más sentimientos, bonitos paisajes y
una curiosa historia.
En plan político-social:
Colosio, el asesinato. Interesante thriller político mejicano
que podría haber firmado en su día el mejor Costa Gavras.
El estudiante. Buena película argentina en la que se
discute de ideología y que es una buena muestra de cómo la izquierda ha perdido
el tiempo muchas veces.
El último Elvis. Argentina también. Más drama humano que otra cosa, pero también
con tintes sociales.
La bicicleta verde. El drama de la mujer en Arabia Saudí en
una película de esa nacionalidad. En la misma línea que un par que se han hecho
sobre Afganistán y con muy buena actriz protagonista.
Sólo el viento. Una película húngara con final muy
previsible y para pasar una mal rato, pero que está muy bien realizada y
muestra una realidad no demasiado conocida de ese país.
Hannah Arendt. Interesantísima. Me llevó a comprar y
leer rápidamente el libro sobre los hechos que se narran: el juicio a Eichmann
en Jerusalén.
The east. Una película norteamericana muy
ecologista, pero un tanto inverosímil en sus planteamientos.
sábado, 14 de septiembre de 2013
Artículos sobre Siria
Olga Rodríguez, una periodista que me encanta, hace un completo y pormenorizado análisis de cómo está la situación en Oriente Medio donde enmarca el conflicto de Siria.
Timothy Garton Ash, analiza sobre todo el problema desde el ángulo de la política interior y exterior de Estados Unidos.
Interesantes y entretenidas memorias


En poco tiempo he podido leer dos libros de memorias
de autores chinos que viven en Estados Unidos. Si el anterior me gustó, éste no
ha sido menos. Unas memorias que abarcan fundamentalmente los años setenta y ochenta
del siglo pasado y que incluyen momentos de la revolución cultural de Mao.
Resulta particularmente curioso que el centro de estas
memorias lo constituya la preparación del funeral de la abuela del autor que,
por cierto, tardó bastante tiempo en fallecer. La fabricación del ataúd, la
preparación de la gran cantidad de ropa necesaria, la organización del viaje desde
Xian donde vive hasta Henan donde está enterrado su marido, etc., forman un
conjunto de actividades a las que se dedica, empleando gran parte de los
ahorros, el padre de Huang que, además, es miembro del partido comunista. Claro
que todo tiene una explicación: en la época maoísta estaban prohibidos los
enterramientos a la manera tradicional y había que incinerar los cadáveres.
Todo ese trajín permite al autor intercalar retazos de
su vida, de sus relaciones familiares y de la vida en general bajo aquel
régimen sobre el que, por otra parte, tampoco carga las tintas en exceso.
Escritas de una forma muy desenfadada, con gran
sentido del humor y con una narración que fluye sin interrupciones y de forma
muy natural.
La segunda parte en la que ya vive en Estados Unidos
pierde bastante de su gracia aunque no deja de ser interesante.
Wenguang Huang, El
pequeño guardia rojo
martes, 10 de septiembre de 2013
Ensayo antisionista


Como lector que tiene entre sus autores favoritos a
varios escritores judíos, y entre sus temas más recurrentes el de los campos de
concentración en general y el Holocausto en particular, la lectura de este
alegato antisionista resulta especialmente interesante.
Conocía a Atzmon como saxofonista de jazz (sin que,
dicho sea de paso, me gustase demasiado), pero he descubierto en este libro a
un verdadero polemista. Arremete con furia y muy buena argumentación y
documentación cuando es necesaria, contra toda forma de sionismo sea de derechas
o de izquierdas, contra la judeidad, contra el uso y abuso del Holocausto del
que llega a decir que lo han convertido en una religión y así contra un largo etcétera de ideas.
“Por ejemplo, yo me considero un “palestino hebreohablante”
y no busco la aprobación de nadie para hacerlo. También me considero un “judío
orgulloso y que se odia a sí mismo” y, de nuevo, no necesito la aprobación de
nadie” (p.102)
A la identidad dedica, precisamente, el primer
apartado del libro; en el segundo, trata de los judíos entre los “gentiles”; en
el tercero, se centra en temas de la historia y su falsificación, para
terminar, en el cuarto, realizando su síntesis.
En suma, un libro enormemente sugerente, que hace pensar,
que descubre perspectivas diferentes (por ejemplo, su visión del revisionismo
que en gran medida comparto) escrito por un autor nacido en Israel y que desde
hace unos años tiene la nacionalidad británica.
Dejo un enlace en el que se dan muchos textos del
libro y se comenta éste de una forma mucho más completa.
Por cierto, es el libro en el que he visto menos información sobre la edición: apenas el nombre de la editorial, el ISBN y el depósito legal.
Gilad Atzmon, La
identidad errante
domingo, 8 de septiembre de 2013
Interesante y compleja novela


Dicen en la presentación que se trata de
una “obra de difícil clasificación, aunque más próxima a la novela histórica
que al ensayo”. Yo creo que, efectivamente, se trata de una novela pero no sé
por qué hay que catalogarla de histórica. En todo caso, eso sí, es una obra
compleja.
Escrita entre 1946 y1947, recoge una
serie de escenas engarzadas por la existencia de un protagonista, especie de
trasunto del autor, que va a Roma a dirigir un periódico de partido. Las
escenas abarcan multitud de temas y lugares de la ciudad. Así, desde la pobreza
en un barrio marginal con gran presencia de las ratas, a la crítica de la
burocracia en la administración, pasando por largos monólogos en los que expone
la situación política en esos momentos con la dimisión del presidente del
gobierno. Al lado de este tipo de situaciones hay otras en las que, por ejemplo, aparece un personaje hablando positivamente de los campos de concentración o
una vieja borracha con una bolsa repleta de dinero y acompañada por un joven; escenas
que surgen de los paseos del protagonista, Carlo, por la ciudad.
La técnica narrativa es muy diferente
según el aspecto que trate, y así nos encontramos con esos largos monólogos
para explicar temas complicados, pero unas páginas después aparecerán descripciones
muy detalladas de los lugares por los que circula, trabaja o vive el protagonista
y siempre también un gran detallismo en la descripción física de los personajes
que van apareciendo.
La lectura resulta desde apasionante a
un poco tediosa según el momento en que nos encontremos. A mí me costó bastante
entrar en la novela, sin embargo la he disfrutado mucho aunque creo que
se trata de un texto un tanto difícil por carecer de una historia y de una
línea argumental clara.
Al principio me recordaba un poco el
carácter discursivo de la obra de Javier Marías.
Una cosa que me ha llamado poderosamente
la atención es la permanente repetición de términos como obscuro, obscuridad,
obscurecer que al escribirlos así el traductor, hace que te fijes más.
Obviamente no los he contado, pero son decenas y decenas las veces en que se
repiten, incluso hay algún momento en que en cuatro líneas aparecen tres veces.
Seguramente se tratará de un recurso estilístico y de una forma de reflejar un
ambiente.
Recomendable como también lo es su Cristo se paró en Eboli de la que guardo
un gran recuerdo aunque hace ya muchos años que la leí y vi la película.
Carlo Levi, El reloj
Artículos interesantes
Santiago Roncagliolo escribe el que más me ha gustado de este domingo porque, además, no se centra en la política concreta.
Soledad Gallego habla de los actuales "brotes verdes". Sólo por la frase final ya merece la pena el artículo.
Elvira Lindo ofrece una peculiar visión de lo que hace falta hoy: un rancio. Discutible, pero...
Josep Ramoneda vuelve de vacaciones con más caso Bárcenas o, mejor según lo plantea, caso Rajoy.
viernes, 6 de septiembre de 2013
Otra visión del problema de Egipto
Alaa Al-Aswany, que ha aparecido hace poco en el blog por su último libro, escribe un artículo sobre la situación en su país que se sale de lo que suele ser habitual. Interesante.
Durísimo documental
Junto con el libro Una temporada de machetes y al documental S21. La máquina de matar, este peculiar documental constituye una trilogía del horror con lo más duro que he leído o visto. En este caso es en Indonesia y aunque se trate de reconstrucciones o precisamente por ello y por hacerlas los propios protagonistas, resulta de una especial dureza y violencia.
Hoy, 7 de septiembre, Muñoz Molina hace una espléndida síntesis de la película.
Hoy, 7 de septiembre, Muñoz Molina hace una espléndida síntesis de la película.
jueves, 5 de septiembre de 2013
Citas recientes
Felicidad
“La felicidad consiste en vivir con alegría rodeada
de una familia apacible”
(Una joven
tutsi de 19 años huida y escondida en los pantanos durante 8 años.)
Jean Hatzfeld, La
estrategia de los antílopes
Religión
O, como confirma Ignace: ”Durante un corto periodo
dejamos de ser cristianos normales, debíamos olvidar los deberes aprendidos del
catecismo. Teníamos que obedecer primero
a los jefes. Y solo después a Dios, pero mucho más tarde para confesarnos y
hacer penitencia cuando estuviera terminado el trabajo”.
(Ignace es un matarife hutu.)
Jean Hatzfeld, La
estrategia de los antílopes
A menudo la labor del escritor puede ser muy pasiva.
Uno debe ser capaz de escuchar lo que lleva dentro. Solo así logrará producir
algo natural, no artificioso.
Hans Keilson, Ahí
está mi casa
Educación
Pero creo que lo mejor para un chico es que se críe
más o menos igual que los otros niños de su país y de su época. En general, no
creo que sea posible criar a un niño para que tenga una u otra filosofía de la
vida. A menudo, el efecto suele ser el contrario. Más vale dejar que, a su
debido tiempo, intente por sí solo encontrar su propio camino…
Hjalmar Söderberg, El juego serio
Edad,
vejez
Hay algo bueno en envejecer. Se gana serenidad,
conciencia y, al mismo tiempo, humildad.
Marisa Madieri, Verde
agua
Eutanasia
La encontraron muerta en el suelo a las nueve de la
mañana siguiente. Cerró así, en la soledad de una noche, una vida acabada hace
ya mucho tiempo.
Marisa Madieri, Verde
agua
lunes, 2 de septiembre de 2013
Sensaciones encontradas


Libro poético en muchos momentos, realista en otros,
apasionado o frío según los personajes de los que hable, libro pues complejo y
variado como corresponde seguramente a su forma de diario, escrito entre 1981 y
1984, pero en el que se recogen principalmente sucesos acaecidos hace mucho
tiempo, en la época en la que tras la Segunda Guerra Mundial la autora se vio
obligada a emigrar desde su Fiume natal al Triste italiano.
A pesar de lo dicho y de la brevedad del texto, 180
páginas, me ha costado entrar en varias ocasiones quizás por la prolijidad al
hablar de sus orígenes familiares. Sin embargo las páginas dedicadas a sus
primeros tiempos en Trieste me han gustado muchísimo, así como la sensibilidad
que muestra su escritura a lo largo de todo el libro. Tiene además el interés de hablar de un exilio bastante desconocido.
Cierra la edición un bonito posfacio de Claudio Magris
marido de la autora.
domingo, 1 de septiembre de 2013
Cercas y Marías
Me gusta la idea de Javier Cercas de ver las cosas desde fuera.
Javier Marías vuelve de las vacaciones con el premio Formentor y la misma idea de los políticos.
Javier Marías vuelve de las vacaciones con el premio Formentor y la misma idea de los políticos.