Como muchos otros antes que él, Abbott descubre, después de casado, que el matrimonio es una lucha (clínicamente, una negociación) por ver cómo se reparte el Mal Humor. Un matrimonio, sobre todo un matrimonio con hijos, no puede funcionar bien si ambas partes andan de mal genio; por lo tanto, el Mal Humor es un privilegio del que no pueden gozar los dos cónyuges a la vez. ¿A quién se le permite estar de Mal Humor? Esto se convierte en una lucha cotidianaChris Bachelder, A propósito de Abbott
Hemos convertido los libros de Historia en una ficción, y ahora hemos de recurrir a la ficción para contar la historia. No deja de ser una paradoja. Al menos, nos quedan las novelas.
Andrés Trapiello, Ayer no más
“¿Dónde empieza y dónde acaba lo que se nos exige que amemos como se corresponde a la humanidad e incluyamos en nuestras ambiciones?¿Son miembros de esta humanidad el degenerado e infrahumano campesino ruso del Mir, el negro de África, el mestizo del suroeste alemán o el insoportable judío de Galitzia o Rumanía?”
Heinrich Clab citado en
Götz Aly, ¿Por qué los alemanes? ¿Por qué los judíos?
Tengo que reconocer que no da la impresión de odiar la religión como la odio yo, más aún, cuando habla de religión se muestra muy moderado y abierto. Pero, a pesar de todo, es una prueba viva más de que nadie que sea verdaderamente grande pude tener nada que ver con esa porquería.
Chistopher Isherwood, Desde lo más profundo
Cuando oigo la palabra “Dios” me dan ganas de vomitar; es la palabra más sucia de todo el idioma.
Chistopher Isherwood, Desde lo más profundo
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