Con este curioso título y los dos
aclaratorios subtítulos se presenta este monumental estudio de un escritor
cuyos libros siempre tienen grandes dimensiones. A lo largo de 800 páginas
Morán va describiendo, analizando y sobre todo criticando los diferentes
momentos y autores que han tenido algo que ver con el desarrollo de la cultura
letrada en España en el período considerado.
Es un libro fundamentalmente sobre escritores, pero también aparecen
políticos y en alguna ocasión pintores, arquitectos y músicos. Destaca el autor
por muchas cosas: por su gran conocimiento del tema; por la capacidad para
expresar muy bien lo que quiere decir yendo además muy directamente al grano;
porque tanto sus filias, pocas, como sus fobias, bastantes más, quedan
perfectamente claras, y así entre las primeras Luis Martín Santos, Max Aub o
Manuel Sacristán, y entre las fobias destacarían Pedro Laín Entralgo, Julián
Marías o Francisco Umbral y un larguísimo etcétera.
Tengo que decir que a mí el libro me
ha tenido enganchado varios días y un montón de horas Creo que lo mismo le
puede pasar a la gente de mi generación que se haya interesado por la lectura y
por la política puesto que gran parte de lo contado lo hemos vivido de alguna
manera.
Una de las cosas que me han llamado la
atención es la preocupación de Morán por dejar bien clara la ascendencia
primero falangista, luego socialista o comunista o anarquista, de muchos
escritores e intelectuales para en algunos casos terminar abrazando hoy
posiciones ultraconservadoras. Lo digo porque en mi caso también ha habido una
evolución característica. Empecé siendo falangista “revolucionario”, en el FES,
(eso sí, esa militancia duró casi exclusivamente el verano de 1969), luego me
convertí en un cristiano de base para poco a poco ir abandonando la fe y
terminar afiliándome, en 1975, al PSOE, que abandoné en 1983 para convertirme
en un “anarquista de peluquería” (o librería que para el caso es lo mismo) y,
muy recientemente, inscribirme en Podemos.
Quizá el momento del libro que con más
atención he leído es aquél en el que habla de la multitud de revistas que surgieron
a finales de los sesenta y en los setenta. Fui lector empedernido de muchas de
ellas y suscriptor de algunas. Y hoy, echando la vista atrás con un poco de
ira, me arrepiento bastante de haber perdido tanto el tiempo leyendo según qué
cosas y según qué autores (por poner solo un ejemplo, ese Leguina intelectual
cuasi revolucionario). No es el caso de Tuñón de Lara o Haro Tecglen de los
que, por cierto, me he quedado con las ganas de que Morán contase alguna cosa
más pues no salen muy bien parados aunque no lo explique.
Por otra parte, el capítulo que más me
ha emocionado ha sido el dedicado a la figura y la obra de Max Aub. De hecho he
adquirido ante mí mismo el compromiso de releer algunos de sus Campos y esas
memorias que tanto tiempo llevan esperando en el estante de libros pendientes.
Realmente del libro de Morán se pueden
escribir muchas páginas, pero como sabe quien se acerca a este blog, me gusta
que los comentarios sean lo más sintéticos posible.
Para ir terminando, dos textos: el
final del estupendo comentario de Bernabé Sarabia en elcultural.es y otro del libro de Morán como ejemplo de uno de los
muchos “retratos” que aparecen en el libro.
“Para bien o para mal la sinceridad,
la potencia, la capacidad de transgredir y de no someterse a lo que se da por
supuesto dan a estas páginas de Gregorio Morán una capacidad de atracción que
el lector, aunque discrepe, siente de principio a fin”.
Ahora sí que, como final, dos enlaces:
una interesante entrevista con el autor y otra con su editor ambas en el diario.es. No lo he mencionado en
ningún momento pero este libro arrastra una fuerte polémica ya que estaba
prevista su publicación por la editorial Crítica del grupo Planeta que se negó
por…(las explicaciones en las entrevistas). Acabo de leer el comentario de Suso de Toro que me parece magnífico y con el que estoy muy de acuerdo.
Gregorio Morán, El cura y los mandarines. Historia no oficial del Bosque de los
Letrados. Cultura y política en España 1962-1996
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