Historia bien construida pero poco interesante

Varias cosas me llamaron la atención de este libro al verlo en la librería: la portada (con la trompeta y los zapatos indicando jazz), su musical título, el hecho de desarrollarse en una ciudad, Berlín, y una época, 1939, que me resultan apasionantes y, finalmente, el que su autora fuera una canadiense de origen ghanés.
De todo ello ha quedado bien poco tras su lectura. Al principio me parecía estar leyendo una de esas novelas negras de los años treinta o cuarenta sobre todo por el lenguaje que utilizan los personajes, y me gustaba, pero a medida que avanza la novela se va diluyendo en un exceso de diálogos sin demasiado interés. La historia no da para una obra de 380 páginas; hubiese bastado con un relato corto. Por otro lado, aunque el grupo protagonista es un conjunto de jazz, la música no está presente en casi ningún momento y, además, los personajes apenas tienen desarrollo psicológico. Tampoco el contexto histórico está demasiado bien tratado.
En definitiva, un libro que teniendo muchos alicientes me ha resultado aburrido y falto de sentido. Cuando me pasa esto y leo las contraportadas, me asalta la duda de si no será cosa mía más que del libro. Nunca logro resolverla.


Esi Edugyan, Un blues mestizo