Hace más de seis años que autoedité Gracias a todos en el que recogía la
mayoría de las citas que había ido recopilando hasta entonces. En este tiempo
he seguido con mi vieja costumbre y he pensado que sería una buena idea
publicarlas en el blog organizadas por temas, con algún comentario si se
tercia, tal y como hice en el libro.
Guerra
Quien no mata, es
matado. ¿Preferiría yo eso? No. Esta es la pregunta más terrible de la guerra:
cuando tienes a un enemigo delante de ti con su bayoneta, ¿preferirías que te
la clavara en la barriga o romperle la crisma y vivir?
Edlef Köppen, Parte
de guerra
En las atroces guerras
que proliferan por todo el planeta, aunque en la matanza se dirimen intereses
económicos y ambiciones personales, la gente se mata por lo que siente:
hostilidad étnica, fanatismo religioso, odio de clase, xenofobia nacionalista y
rabia personal.
Manuel Castells, Comunicación y poder
Piensa (Limónov) que en dos horas de guerra se
aprende más sobre la vida y los hombres que en cuatro decenios de paz. La
guerra es sucia, cierto, la guerra es insensata, ¡pero mierda! También la vida
civil es insensata a fuerza de ser monótona y razonable y reprimir los
instintos. La verdad es que nadie se atreve a decir que la guerra es un placer,
el más grande de todos, pues de lo contrario se detendría de inmediato. Es como
la heroína: una vez que la has probado quieres tomarla otra vez.
Emmanuel Carrére, Limónov
Por lo visto, siempre
me pasa lo mismo cuando me involucro en política o en una guerra. Lo único que
siento son las incomodidades físicas y un profundo deseo de que termine ese
absurdo sinsentido. Después comprendo el significado de los acontecimientos,
pero cuando ocurren tan solo pienso en poner tierra de por medio; tal vez sea
un tanto innoble por mi parte.
George Orwell, Homenaje a Cataluña
“Porque desde luego el
pueblo no quiere la guerra: ¿por qué debería querer un pobre sujeto que trabaja
arriesgar su vida en una guerra, cuando lo más que puede conseguir en ella es
volver a su granja de una pieza? Naturalmente la gente corriente no quiere una
guerra; Ni en Rusia, ni en Inglaterra ni en América, ni por supuesto en
Alemania. Eso se entiende. Pero son los líderes los que determinan la política
y siempre es un asunto fácil arrastrar a la gente… El pueblo puede ser atraído
por el mandato de los líderes. Eso es fácil. Todo lo que hay que hacer es
decirle que están siendo atacados y denunciar a los pacifistas por su falta de
patriotismo y por exponer al país al peligro. Funciona del mismo modo en
cualquier país.”
Hermann Goring durante
el juicio de Núremberg citado en
Pascual Serrano, Medios violentos. Palabras e imágenes para
el odio y la guerra
Me desazonaba ser un
desertor en potencia, lo que, con el tiempo, descubrí que es cualquier hombre
que se ve arrastrado a una guerra; sobre todo, cualquier hombre con dos dedos
de frente, con un poco de sentido común. Lo humano es desertar, lo absurdo es
quedarte allí a la espera de que la sangre te empape, la tuya o la ajena. Ni
siquiera las ideas consiguen quitarte eso de la cabeza. Alguien me dirá que peleas
con saña porque sabes que defiendes una causa justa. No es verdad.
Rafael Chirbes, En la orilla
La persona que ha vivido una gran guerra es
diferente a la que no ha vivido ninguna. Pertenecen a dos tipos humanos que
nada tienen que ver el uno con el otro. Nunca encontrarán un lenguaje común,
porque a la hora de la verdad la guerra no se puede describir, no se puede
compartir; no se le puede decir a otra persona: quédate con un poco de mi
guerra. Todo el mundo tiene que llevar a cuestas la suya hasta el final.
Ryszard
Kapuscinski, Cristo con un fusil al
hombro
Ahora
maldecían la guerra, la maldita guerra.
-¿Por qué
lucháis entonces?- preguntó Jan.
-¡Qué
ingenuo eres, muchacho! – le espetó Distelmann-. Porque tenemos que hacerlo.
¿Te crees que alguien nos preguntó?
Rudolf
Frank, La calavera del sultán Makawa
Teníamos
miedo. Miedo a todo. Al despiadado adversario: A nuestros no menos despiadados
jefes. A los elementos naturales, hostiles y mortíferos. A la nieve y al frío.
A las ladillas y a los piojos. A toda esta guerra hecha de operaciones
relámpago, de encerronas y emboscadas, de lágrimas y de todo tipo de
excreciones. Ya fueran camaradas nuestros o soldados franceses con las tripas
esparcidas alrededor de sus cuerpos enclenques y azulados por las moscas.
Entrañas vomitadas por la boca. Casquería que desbordaba sus contornos
corporales ilustrando los límites de quienes aún no estábamos muertos.
Esperando la muerte.
Rachid
Boudjedra, Los campos de chumbera
La guerra es una realidad sólo para aquellos que
están apresados en su interior, sangriento, sucio y repugnante. Para otros no
es sino una páginas en un libro o unas
imágenes en una pantalla; nada más.
Ryszard Kapuscinski, Un día más sin vida
La guerra
abre abismos en las almas y en los pueblos.
Didó
Sotiríu, Tierras de sangre
La guerra
tiene una extraordinaria honestidad, que despoja al hombre de cualquier
envoltorio convencional y lo deja cara a cara con una realidad tan desnuda e
inexorable como él mismo.
Frederic
Manning, Los favores de la fortuna
Por eso
el espíritu de gran familia que se apodera de un país entero cuando estalla una
guerra me hace sospechar de la gente que lo celebra, porque la veo sonriente y
llena de esperanza, y demasiado dispuesta para las heroicidades, mientras que
los muchachos que visten el uniforme se sienten confundidos y desgraciados, y
sólo empiezan a sonreír cuando ya no se puede hacer nada más, y nunca se hacen
demasiadas ilusiones porque no saben muy bien lo que pasa, ni qué significa lo que
pasa, ni qué consecuencias traerá consigo –para ellos, quiero decir-, y no
tienen prisa por convertirse en héroes porque, con un poco de mala suerte, tal
vez se conviertan en héroes muertos.
William
Saroyan, Las aventuras de Wesley Jackson
Pero un
huracán es un acto de la naturaleza. Tal vez una guerra también lo sea, aún no
lo sé. Pero yo tengo el presentimiento de que una guerra es un acto humano. Y
no me gusta. Lo odio con todas mis fuerzas. Pero cuando su ira me atrapa no sé
qué puedo hacer contra ella, salvo esperar salvarme, que es lo que estoy
haciendo.
William
Saroyan, Las aventuras de Wesley Jackson
Si una guerra es justa, todos los hombres del
país deberían ir a luchar, sobre todo los que tienen más pasta, los que tienen
más que perder, pero ésos no van a la guerra. Quieren que tú y yo vayamos a
luchar mientras ellos siguen ganado
dinero… y a nuestras expensas. No les
importa a cuántos de nosotros matan, sólo que ellos puedan conservar lo que
tienen y conseguir más. También son muy patrióticos, diez veces más patrióticos
que nosotros. A ellos les gusta la guerra y nosotros la odiamos.
William
Saroyan, Las aventuras de Wesley Jackson
“-Oh, usted es un cobarde por completo, Ferdinand.
Usted es repugnante como una rata…
-Sí, un cobarde por completo, Lola, rechazo la
guerra y todo lo que ella conlleva (…) y soy yo quien tiene razón, porque soy
el único que sabe lo que quiere.
-¡Pero es imposible rechazar la guerra, Ferdinand!
Sólo los locos y los cobardes rechazan la guerra cuando la patria está en
peligro…
-Entonces ¡que vivan los locos y los cobardes! O más
bien que sobrevivan los locos y los cobardes. ¿Se acuerda de un solo nombre,
por ejemplo, Lola, de uno de esos soldados asesinados durante la guerra de los
Cien Años?... No, ¿no es cierto?...Jamás se lo ha preguntado, ¿no? Para Ud. son
anónimos, indiferentes y más desconocidos que el último átomo de esos papeles
de diario que se encuentran delante suyo, que su caca de todas las mañanas…”
Céline, Viaje
al fin de la noche, citado en
Enzo Traverso, A
sangre y fuego. De la guerra civil europea (1914-1945)
“La guerra es lo que ha hecho a los hombres y a su
tiempo lo que son. Jamás un conjunto humano como el nuestro había bajado a la
arena para dirimir quién se haría con el poder sobre la época. Porque nunca una
generación había salido de un portón tan oscuro y grandioso como esta guerra
para regresar a la luz de la vida.”
Ernst Jünger citado en
Enzo Traverso, A
sangre y fuego. De la guerra civil europea (1914-1945)
La guerra supone una escuela de maniqueísmo.
Tzvetan Todorov Insumisos,
pág.24
(…) la
guerra, viene a decirnos, es una y es la
misma, fango, muerte, desesperación, dolor, penalidades y también de vez en
cuando risas tontas, un poco de histeria. Y fuera de ahí, grandes exclamaciones
patrióticas, mentiras oficiales y podredumbre moral.
Juan Bonilla en el Prólogo de
Wyndham Lewis, Estallidos
y bombardeos
Seis mil alemanes caídos: en el campo del honor.
¿Qué era eso, el campo del honor? ¿Es un honor clavarle a alguien una bayoneta
en el vientre? Campos de grano, campos de patatas… Aquéllos eran campos del
honor. ¿Qué es el altar de la patria? ¡Un matadero manchado de sangre!” ¿Qué
son “nuestros bienes más sagrados”? ¡Los depósitos bancarios! Los bienes más
sagrados de las viudas de guerra son las miradas de sus hijos y maridos amados.
Una granada de mano ha reventado el bien más sagrado de la viuda de guerra.
¡Menudas expresiones execrables que les cuestan la vida a millones de personas!
Deberían desenmascararlas al fin.
Leonhard Frank, A
la izquierda donde el corazón
Al
hacer esta entrada he descubierto que es uno de los temas de los que más citas
he ido entresacando estos últimos años. No sé si será por el tipo de libros que
he leído o por lo que ha estado pasando en el mundo. Dejo que sea un
monográfico.
La
mayoría de las citas se comentan solas y tiene una enorme fuerza expresiva., no
obstante, insisto en algunas.
Terrible,
pero seguramente cierto, al menos en parte, lo que dice Carrére que piensa
Limónov. Debe de ser la adrenalina y todo eso.
Muy
interesante la cita de Goering porque se basa en su experiencia como gobernante
que llevó a todo un pueblo culto y educado a la guerra.
Crudo
y descriptivo, pero muy iluminador la de Boudjedra.
Acertada
la idea de Saroyan sobre la desigualdad social ante la guerra. En cualquier
libro de historia se puede apreciar esa diferencia.
Cuánto
se puede llegar a decir en una sola frase como hace Todorov. Maniqueísmo,
además, por parte de todos.
Magnífico
por su expresividad y contundencia al texto de Frank.
Bueno, yo desde luego me posiciono con las opiniones del sinsentido y el horror, que son casi todas exceptuando las primeras. Creo que en general los soldados, sobre todo si hablamos de guerras con ejércitos, van obligados y no tienen ni idea de por qué pelean. De acuerdo con todas las que van en ese sentido, entre ellas con la de Chirbes, debo ser una cobarde y la de Kapuscinski me ha recordado algo que siempre pensé de mis padres ¿cómo se puede vivir con todos esos recuerdos?
ResponderEliminarPor eso yo creo que la escena de una película que mejor relata el horror de la guerra para los pobres soldados es el principio de "enemigo a las puertas".