jueves, 28 de abril de 2022

Recuerdos de un tiempo difícil


He leído la mayor parte de lo publicado por y sobre Pablo Iglesias y Podemos. Además, he estado inscrito en el partido, he sido apoderado en las primeras elecciones a las que se presentó tanto autonómicas como generales y durante un par de años colaboré con una cantidad mensual a su financiación. A Iglesias lo conozco desde sus primeras apariciones en los medios tanto en Intereconomía como en el programa de Cintora. Por cierto, tengo grabado en la memoria el día en que Cintora le preguntó cuáles serían sus principales medidas en el caso de llegar al gobierno e Iglesias se dirigió a la pizarra y comenzó a escribir los artículos de la constitución que modificaría.  Cuento esto como anécdota sin ninguna doble intención.

Todo lo anterior viene a cuento para explicar que he sido seguidor del primer Podemos y que en gran medida se debió a Iglesias, a lo que planteaba y a cómo lo hacía. Cuando más adelante comenzaron las tensiones internas y, sobre todo, cuando se produjo la alianza electoral con IU, me fui enfriando.

Pero entremos en el libro. Lo primero que hay que hacer es dar las gracias al autor por haber dejado tan pronto constancia de cómo ha vivido esos años dedicados de lleno a la actividad política. Hay que advertir que el libro recoge un conjunto de conversaciones con el periodista Aitor Riveiro ya que, como el propio Iglesias explica, a la solicitud que le hicieron de escribir sobre esa experiencia él contestó que prefería conversar con alguien y que luego este lo transcribiese.

Es curioso que haya sido Riveiro el elegido porque es quizá el periodista del que he leído más insultos y descalificaciones dirigidos a él por los seguidores de Podemos de lo que se ha llamado el sector pablista. Cuando he entrado a ver los comentarios a algunos de sus artículos sobre ese partido en eldiario.es, y han sido muchos porque ha sido el encargado de esas informaciones, la mayoría consistían en diferentes formas de descalificación.

Lógicamente comentar un libro de estas características es complejo y difícil. Hay un buen resumen de los aspectos más llamativos hecho por Íñigo Aduriz en eldiario.es que está bastante bien. Yo solo quisiera destacar algunas de las cosas que me parecen más relevantes.

Es bastante impactante el relato sobre el acoso sufrido, pero aún lo es más la falta de solidaridad tanto política como mediática que acusa. Fue así y es algo que no se debería olvidar de cara a posibles problemas futuros.

Para Iglesias la lealtad es el valor supremo y dedica varias páginas a ello evitando dar según qué nombres aunque el lector ya sabe a quién o quiénes se refiere. Sobre la polémica con Errejón, lo mejor es leer los libros de ambos y decidir. Yo lo he hecho. Por cierto, hablando de lealtad deja la siguiente frase: “(…) a cada personaje le definen sus enemigos y sus alianzas”. (p. 103), frase que repite varias veces, quizá demasiadas, a lo largo del libro.

Dedica también bastante espacio a diferentes momentos en los que se muestra como un buen estratega o, en el fondo, como un buen jugador de ajedrez. Imagino que algunos de los implicados podrán dar versiones diferentes, pero creo que en lo fundamental lo que cuenta debe ser una parte importante de lo que sucedió.

Aunque es un libro de experiencias, hay un apartado titulado “Los límites de la política” en el que hace un análisis más teórico que me ha parecido muy claro y enriquecedor y del que reproduzco un fragmento realmente expresivo:

 

“Como ha explicado muchas veces Enric Juliana, hace cien años la izquierda quería hacer la revolución socialista. Ahora, la izquierda quiere acabar con la ley mordaza, subir el salario mínimo, defender los derechos de las mujeres, asegurar el ingreso mínimo vital, que predominen los convenios de sector para mejorar la capacidad negociadora de los sindicatos, proteger a las minorías y legislar derechos sociales para gays, lesbianas y transexuales”. (p. 90)

 

También son muy interesantes las diferentes críticas que va haciendo del PSOE a lo largo de todo el libro. Críticas que comparto ya que no en balde milité en ese partido entre 1975 y 1983.

Ahora bien, si tuviera que destacar algo del libro sería la referencia constante al papel de los medios en la política de este país y al predominio de los medios de la derecha e incluso de la extrema derecha. Desde que leí por primera vez a Pascual Serrano tomé conciencia del papel tan importante que tienen en la formación de las mentalidades y de las voluntades políticas. Desde luego lo que está pasando en nuestro país en los últimos tiempos no se explica sin el papel preponderante de algunos medios y de algunos personajes dentro de ellos. En el libro se cita a alguno y cualquiera que esté leyendo este comentario tendrá su particular lista.

Que este es uno de los principales problemas que tiene la izquierda en este país, y el propio país, está muy claro, lo difícil es encontrar salidas para esta situación. El mismo Iglesias lo está intentando con el podcast en Público, pero como él mismo sabe resulta absolutamente insuficiente.

Como me está quedando un comentario demasiado largo, solo un último apunte. Tiene razón Iglesias en la cantidad de éxitos obtenidos tanto electorales como de cambio en las formas de hacer política, pero echo en falta un mínimo análisis de cómo está hoy el partido que, al menos por lo que yo veo, está prácticamente desaparecido en la mayor parte del país. Una breve nota sobre la edición. Por lo que veo la editorial Navona es de las pocas que deja constancia de la persona que ha hecho la corrección. Este es un ejemplo que deberían seguir otras editoriales. La pena es que en este caso, la correctora ha dejado multitud de erratas en el texto, ninguna demasiado importante pero que afean la edición. Cosas como palabras juntas, falta de alguna letra, no cerrar unas comillas, poner sexy y sexi en dos páginas casi seguidas y, lo peor, poner el 7 de una nota que luego no aparece en las notas al final del libro.

En cualquier caso, es un libro que merece la pena leer. Ayuda a conocer más y mejor a uno de los principales políticos de los últimos años, a quien ha sido capaz de cambiar la dinámica política que llevaba el país y de ilusionar a miles de personas convenciéndolas de que era posible producir cambios importantes. Obviamente, es un libro de parte, como no podía ser de otra manera y, además, de uno de los personajes más atacados del país, pero creo que en lo fundamental cuenta gran parte de la verdad y, desde luego, es capaz también de mostrar sus debilidades lo que lo hace particularmente valioso y humano. No me imagino a tipos como González o Aznar escribiendo algo así.

 

 

Pablo Iglesias, Verdades a la cara. Recuerdos de los años salvajes. Edición de Aitor Riveiro.

 

 

 

 

 

martes, 26 de abril de 2022

Criticando el capitalismo



En el libro se recogen un conjunto de siete conferencias que ambos profesores dieron en 2019 formando parte de un curso bajo el título de Consecuencias del capitalismo. Waterstone daba una visión más teórica y conceptual de cada uno de los temas, mientras que Chomsky hacía las ilustraciones históricas correspondientes para que se entendieran mejor.

Las conferencias fueron: Sentido común, postulados y poder. El sentido común actual: realismo capitalista. Capitalismo y militarismo. Capitalismo frente a medioambiente. Neoliberalismo, globalización y financierización. Resistencia y respuesta. Cambio social.

Los diferentes epígrafes expresan bastante bien el contenido aunque  no en todos los casos como comentaré más adelante.

El libro tiene más de 350 densas páginas por lo que me limitaré a destacar algunas cosas que me han parecido especialmente interesantes.

En la segunda conferencia se da un magnífico repaso a la teoría marxista del valor, la plusvalía y la acumulación con una gran síntesis y muy clara además. En la tercera es interesante la distribución de fases del imperialismo que hacen. Hay en la cuarta un buen repaso también de los principales problemas medioambientales. En el quinto se explica muy bien el surgimiento del neoliberalismo.

Sin embargo, las dos últimas conferencias me han defraudado. Por un lado, porque en la que habla de la resistencia y las respuestas se hace de forma muy superficial y, cuando intentan profundizar, no se entiende bien. Por otra parte, es muy engañoso el título de la última dedicada al cambio social pues yo entendía que la dedicaría a ver cómo hacerlo y consiste en hablar del aborto, las armas y los cambios que se han producido en los partidos demócrata y republicano.

Precisamente en esta ausencia está el principal problema que le veo al texto y que es el habitual en los que analizan la economía o la política desde la izquierda, esto es, hacen unos magníficos y profundos análisis, pero a la hora de plantear soluciones demuestran una total carencia de alternativas y proyectos. Así, por ejemplo, en este libro se dedica una sola  página, la 166, al tema con ideas como: “La alternativa en la que pensamos es una economía dirigida por los productores, es decir, por los propios trabajadores, a través de la democratización del lugar de trabajo”. (p. 166)

Una preciosa idea que, además, lleva más de dos siglos circulando como tal sin que nadie, en ningún lugar, haya sido capaz de organizar un territorio extenso con ella.

Claro que, al mismo tiempo, recogen análisis tan sugerentes como el siguiente:

“(…) Anderson analiza algo con lo que todos estamos familiarizados, pero no “vemos”: el hecho de que, en realidad, la gran mayoría de la población está gobernada durante la mayor parte de su vida consciente por gobiernos privados, más exactamente, por tiranías privadas.

Cuando te alquilas a cierta concentración de capital en el sector privado –en eso consiste aceptar un trabajo-, estás entregando tu vida a una dictadura. De hecho, una forma extrema de dictadura que supera con creces las dictaduras políticas. La tiranía a la que te entregas tiene un control total sobre ti. Controla cada minuto de tu jornada laboral: cómo debes vestirte y qué te está permitido decir, cuándo te está permitida una pausa para ir al baño. Cómo se mueven tus manos y tus piernas, si fumas o no en casa. Prácticamente todo en tu vida está controlado por esta dictadura extrema, que supera con creces cualquier dictadura totalitaria en el grado de control que ejerce”. (p. 98) (Se refiere a un libro de Elizabeth Anderson publicado en 2017)

En definitiva, un libro que resulta interesante en partes de alguno de sus capítulos, pero que al final da menos de lo que su sugerente título ofrece.

 

Noam Chomsky y Marv Waterstone, Las consecuencias del capitalismo. La fábrica de descontento y resistencia. Traducción  María Enguix Tercero.

 

domingo, 24 de abril de 2022

El mundo de la "okupación"


Este libro forma parte de la colección Episodios Nacionales que ha puesto en marcha la editorial Lengua de Trapo. De esta serie leí hace un par de meses el que ha escrito Elizabeth Duval que me gustó bastante porque me puso en contacto con una generación y unas realidades muy lejos de la mía y las mías.

Este de Lanchares también es un reflejo de la misma generación y, al menos en parte, de la misma línea ideológica que el de Duval; quizá algo más radical no tanto políticamente como de comportamientos y actitudes, pero también menos literario, si es que se puede decir así.

La autora se centra en unos personajes del mundo un tanto marginal de la “okupación” de espacios no tanto como vivienda, que también, como para utilizarlos para desarrollar proyectos culturales y artísticos.

El siguiente fragmento es un buen resumen de alguno de sus propósitos:

Ni siquiera nos gusta la palabra comuna. Nosotras decimos que somos un colectivo y que nuestra casa es un espacio liberado. Liberado del patriarcado, de la moral sobre todo del mercado, porque no le ponemos precio a la comida ni a la bebida ni a la entrada ni a nada. La gente puede pedir y soltar su pasta y por supuesto todo está pensado para que suelte la máxima pasta posible. Vaciador te ofrece la promesa de cumplir tus sueños. La posibilidad definitiva de escapar”. (p. 57)

Antes de entrar en el tema de las “okupaciones” hace una buena descripción de lo que sucedió en la Puerta del Sol el 15M, sin obviar algunos de los problemas que surgieron.

A partir de ahí se centra en narrar diferentes actividades que ponen en marcha en los distintos espacios que habitan. Aquí tengo que decir que el libro me ha resultado a veces un tanto desconcertante y no he sabido siempre dónde se desarrollaba la acción. Tampoco he conectado con los diferentes personajes que aparecen. No sé si se debe a un problema de la escritura o es algo más personal.

No obstante lo que acabo de decir, el libro me parece interesante porque muestra una realidad de la que apenas he tenido información y si la he tenido que casi siempre centrada en destacar los aspectos más negativos.

Además, tiene momentos muy logrados como, por ejemplo, cuando relaciona Mecano con Miguel Ángel Blanco y la trama Gürtel o las diversas intervenciones policiales que narra.

Por otro lado, la autora se muestra bastante crítica con la concreción política en la que terminó el movimiento del 15M, aunque, algo muy habitual en este tipo de grupos, tampoco quede claro cuál podría ser el objetivo más allá de declaraciones como la que sigue:

“Todas a nuestra manera vamos a seguir dando lo mejor de nuestra juventud, en la creencia, ingenua pero convencida, de que otro mundo es posible, ya sea a través del delito o del respeto, de la fe o el paganismo, de la violencia o del cuidado.

(…)

Porque si algo nos podía distinguir era la capacidad de encarnar los frutos de nuestra imaginación. Quizá era eso lo que operaba también en las calles, un fulgor momentáneo que a base de buscar definición fue perdiendo la potencia creadora de quien no encaja en unas siglas o en un valor de cambio”. (p. 142)

Un libro interesante para quienes desconocemos esos temas y, seguramente, también para quienes sí los conozcan e incluso participen porque hay buenas reflexiones críticas.

Habrá que seguir leyendo otros ejemplares de esta colección.

 

Rocío Lanchares Bardají, Hotel Madrid, historia triste.

 

    

domingo, 17 de abril de 2022

El título lo dice todo


No se me ocurre mejor resumen del libro que el de este fragmento de la crítica en el Frankfurter Allgemeine Zeitung que la editorial ha reproducido en la solapa:

“Unas memorias contra la guerra, el catolicismo y la religión en general, la estrechez de miras de una ciudad de provincias, la intolerancia, la hipocresía, la cobardía, la mezquindad, la violencia (…) difícilmente se puede hacer algo mejor con una infancia de mierda”

La verdad es que, por otra parte, es difícil encontrar un libro con un título tan impactante, sugerente y que, además, se ajuste mejor a su contenido. Altmann despliega a lo largo de las 375 páginas del libro todo un cúmulo de malos tratos tanto físicos como psicológicos por parte de un padre que no apareció hasta que él cumplió los nueve años, una persona que, tal y como la describe, resulta absolutamente despreciable. Alguien que perteneció a las SA y las SS y que tras la guerra se dedica al negocio de la venta de rosarios y demás objetos de culto religioso en Altötting, un pueblo de Baviera al que acuden miles de peregrinos por una virgen que allí existe.

En un momento del libro se plantea cuál pudiera ser la explicación de tal comportamiento: 

“¿Cómo terminó Franz Xaver Altmann convirtiéndose en esa persona? ¿Fue por la guerra? ¿Fue por su madre, enferma de puritanismo (…)? ¿Fue por su padre, un hombre frío que lo empujó a una existencia fría centrada en el trabajo (…)? ¿Fue por su propia caída de mujeriego a papá con panza? ¿Fue por Altötting, este oasis de mojigata consanguinidad que resultó ser el terreno más fértil para sus delirios de rutina, orden y crueldad? Sí y mil veces sí: fue por todo eso.” (p. 101-102)

Ahora bien, entenderlo no quita nada de importancia a su forma de proceder en casos como, por ejemplo, el de este otro fragmento: 

“A mi padre nunca se le agotaban las ideas para impedir que sus hijos pudieran dedicarse a ser jóvenes. No sabría decir quién de los dos (Manfred o yo) las pasó más canutas durante los años siguientes, quién recibió más humillaciones, quién se oyó decir más a menudo que no valía ni valdría nunca para nada.” (p. 159)

Y si trataba mal a los hijos, principalmente a Andreas, no hacía otra cosa con la madre aunque esta pronto abandonó la familia y, salvo un intento posterior con una terapeuta de pareja, no volvió a la casa familiar.

De ella deja el autor textos como los siguientes:

“Por lo menos, mi madre no era una indeseable, ni actuaba de forma sádica y monstruosa. Era una pobre mujer, una cobarde que había visto cómo su vida discurría en la dirección diametralmente opuesta a lo que había soñado. Pero, aparte de eso, poseía una generosidad propia de una santa, una cualidad que nunca había dejado de admirar.” (p. 347-348) 

“Mi madre estaba acabada, su miserable vida íntimamente ligada a sus miserables ideas. Iba a terminar como una católica de manual: doctrinaria, asexual, melancólica, muerta de miedo y contribuyente cumplida. Una oveja modélica.” (p.351)

Y si el padre y la madre reciben este tratamiento, la religión, sobre todo la católica, está omnipresente en el libro dando con ello cuenta del rechazo que por ella siente el autor. (Rechazo que, por cierto, comparto al haber tenido una educación al menos en parte parecida a él). Los profesores de religión que menciona, con sus nombres, apellidos y mote, maltrataban a los alumnos y en un caso se trataba también de un pedófilo.

Del trato que da a la religión reproduzco este fragmento sobre la confesión que me parece especialmente conseguido:

“Cuánta arrogancia: un desconocido (el cura) le perdonaba a un desconocido (a mí) los actos y pensamientos que este había tenido contra otro desconocido (para el cura). El pastor absolvía a una de las ovejas del rebaño por sus pensamientos de oveja y sus actos de oveja y le imponía una penitencia de tres padrenuestros y tres avemarías, que la oveja recitaba de corrido nada más salir de la iglesia, para volver a sentirse como una oveja inocente. Si uno le explicaba este procedimiento a alguien que no supiera nada de la Iglesia católica, a la persona en cuestión le parecería una actuación propia de un manicomio, lógicamente: un loco se arrodillaba delante de otro loco para escenificar una obra demencial”. (p.189-190)El título lo dice todo 

En fin, un libro del que se pueden decir muchas cosas, que puede no gustar a muchos lectores porque resulta a veces algo reiterativo en lo que narra, pero que es de una sinceridad que, como dice la editorial en la contraportada, es comparable a Thomas Bernhard (cuyos libros dedicados a su infancia y juventud son absolutamente recomendables). El libro termina con un Epílogo de unas cincuenta páginas en el que Altmann cuenta a grandes rasgos cómo ha sido el resto de su vida y cómo empezó a vivir de la escritura como reportero a la edad de 38 años. También da alguna información realmente terrible de su infancia que es mejor no desvelar por si quien lee este comentario se decide a leer el libro; un libro que, por cierto, he leído en un par de tirones porque me tenía realmente absorbido.

 

Andreas Altmann, La vida de mierda de mi padre, la vida de mierda de mi madre y mi propia vida de mierda. Traducción Carles Andreu.

 

 

 

miércoles, 13 de abril de 2022

Premio Nobel 2021


Creo que este es el segundo libro que se traduce de este autor que obtuvo el Premio Nobel de Literatura el año pasado. En los fragmentos de críticas  que la editorial ha reproducido en la solapa se habla de la novela como de una “historia de iniciación y una denuncia de la colonización” o de “un retrato evocador de un continente africano al borde del cambio”. De ambos temas trata la novela aunque para mí es sobre todo una novela de aventuras.

La historia se desarrolla entre finales del siglo XIX y 1914. Cuenta diversos momentos de la vida de Yusuf, un joven que a los doce años es entregado por su familia a un comerciante, Aziz, en prenda hasta que puedan pagar la deuda que tienen contraída con él. Al principio vive en su casa de la costa y ayuda en la tienda, pero cuando cumple 16 años Aziz hará que le acompañe en sus viajes para comerciar en el interior del continente donde le sucederán multitud de aventuras.

Estos viajes le sirven a Gurnah para dar una visión de cómo era la vida en esa época y cómo poco a poco iba cambiando por la presencia de los europeos, fundamentalmente británicos y, sobre todo, alemanes. Asistimos a conversaciones en varias lenguas desde el árabe al suajili y a la presencia de gentes de muy diversa procedencia como somalíes, indios, granjeros europeos, militares ingleses y alemanes y, lógicamente, los habitantes negros originarios de la zona.

Sobre los cambios que se producen por la presencia de los europeos Gurnah se muestra bastante crítico con fragmentos como el que reproduzco a continuación, sin embargo no me parece que sea uno de los principales objetivos de la novela:

 

“Los comerciantes, atemorizados por la ferocidad y la crueldad de los europeos, hablaban de ellos con asombro. Se apoderaban de la mejor tierra sin pagar un solo abalorio, obligaban a la gente a trabajar para ellos con engaños, comían lo que fuese, aunque estuviera duro o podrido. Como si de una plaga de langostas se tratase, su voracidad no tenía límite ni decencia. Imponían tributos para esto, tributos para aquello, prisión para el infractor, y en ocasiones el látigo y hasta la horca. Lo primero que construyen es un almacén, luego una iglesia, a continuación un cobertizo a  fin de poder controlar el comercio y gravarlo con un impuesto”. (p. 92-93)

 

Hablaba antes de que también es una novela de iniciación, uno de los muchos temas que trata Xavi Ayén en la entrevista con el autor muy extensa y completa en lavanguarida.com. y en la que se puede leer los siguiente:

 “Es una novela de aprendizaje. ¿Qué ha aprendido Yusuf al final del libro?

El viaje le muestra la inmensidad del mundo. Aprende lo que es la crueldad, a mantenerse sereno y a no caer en el pánico, a protegerse. También a amar... y a perder ese amor”.

En fin, un libro bastante entretenido, que muestra una época y una zona del mundo (Kenia y Tanzania actuales) que no suele aparecer en las novelas y con un conjunto de personajes curiosos y bien delineados. Obviamente, está muy bien escrito aunque habrá que leer algo más para valorar la justicia de la concesión del premio.

Este libro se publicó en su original inglés en 1994 porque hay que advertir que, aunque Gurnah nación en Zanzíbar, vive en Inglaterra desde hace más de cincuenta años.

Un comentario sobre la traducción. Me ha sorprendido que utiliza el sistema antiguo de acentuación de pronombres y palabras monosilábicas que ha cambiado hace ya unos años. Además, hay bastantes términos en lengua imagino que suajili de los que no se explica el significado.

Abdulrazak Gurnah, Paraíso. Traducción Sofía  Noguera Mendía.

 


martes, 12 de abril de 2022

Otra versión del conflicto en Ucrania


El autor es un gran conocedor de la zona ya que ha sido corresponsal durante 35 años en Moscú, Pekín y Europa del Este.

En este libro se recogen seis artículos ya publicados, al menos eso parece, si bien no se deja constancia ni de la fecha ni de dónde lo fueron.

Los dos primeros se centran en la situación rusa tras la caída de la Unión Soviética, la visión de la geopolítica, el papel de Putin y alguna referencia a la guerra recién iniciada.

El tercero se centra en lo que sucedió en 2014 en Maidán basándose en lo que entonces escribió. Es un artículo fundamental para entender muchas de las cosas que han sucedido posteriormente.

En el cuarto, bajo el título de Una nueva guerra fría, se centra en la Carta de París de 1990, un documento que fijaba un nuevo concepto de seguridad para Europa y que, por lo que cuenta Poch, fue obviado por la OTAN cuando solo dos años después empezó su ampliación hacia el este.

El quinto artículo, Claves de un polvorín, es fundamental y, desde luego, solo por él ya merece la pena leer el libro. A lo largo de sus más de veinte páginas Poch nos muestra cuál es la realidad de Ucrania, sus enormes diferencias regionales y las fracturas que estas conllevan. También, aunque de forma demasiado breve, se cuenta que, tras el cambio de 2014,  llegó al poder “una variante local y particularmente corrupta de neoliberalismo”,  pero al mismo tiempo se fue imponiendo la narrativa del nacionalismo de extrema derecha por la que se prohibieron fuerzas políticas como el Partido Comunista o canales de televisión que emitían en lengua rusa.

En el breve capítulo que cierra el libro, Una partida insensata, deja constancia de las diversas insensateces que se están cometiendo, y no solo por parte rusa.

La lectura de este breve libro de apenas 93 páginas deja con distintas sensaciones. Por un lado, con la de que el consenso de la visión sobre el conflicto de los medios occidentales resulta altamente sospechoso ya que, además, en las relaciones internacionales no todo es lo que parece. De aquí me surge la idea de que creo que se está repitiendo aquello de que es “nuestro hijo de puta”. Por otra parte, en el libro se apuntan un montón de aspectos de la realidad que sería muy útil que estuviesen más desarrollados. Es uno de esos libros que cuando se acaban el lector pide más, mucho más, porque Poch, como buen periodista, no solo es interesante por lo que dice sino que también lo es por cómo lo dice, por su claridad en la exposición.

En definitiva, un libro muy recomendable para quien quiera tener una visión más amplia y, sobre todo, más compleja de lo que está sucediendo en Ucrania. Evidentemente se trata de una versión, pero muy razonada y con datos e informaciones relevantes.

Hay una interesantísima y muy completa entrevista de Pablo Iglesias con el autor en ctxt.es en la que se amplían y se actualizan varios de los temas tratados en el libro.


Rafael Poch-de-Feliu, La invasión de Ucrania.

 

 

jueves, 7 de abril de 2022

Buen descubrimiento


Del Amo ganó el premio Goncourt de primera novela en 2011 con otro libro, pero eso ya da una idea de que era alguien a tener en cuenta. Que yo sepa esta es la primera obra suya que se traduce  y tengo la impresión de que no será la última.

El libro se inicia de una forma muy curiosa pues narra, y muy bien por cierto, una cacería hecha por hombres prehistóricos. A continuación se centra en la historia central del libro que es la relación entre los tres miembros de una familia formada por el matrimonio y el hijo de nueve años.

La  historia está estructurada en dos momentos del tiempo cercanos entre sí, pero diferentes. En el primero, los tres se dirigen a una casa que el padre tiene en la montaña y que heredó de su padre. En el otro se va contando cómo tres semanas antes el padre regresó después de una larga ausencia y les plantea ese viaje a la montaña. Estos dos momentos los va alternando a través de toda la novela y así vamos conociendo algunas de las cosas que les han ido sucediendo, si bien otras quedan ocultas con un cierto halo de misterio.

Creo que es mejor no decir mucho más de la historia propiamente dicha. Quizá solo advertir que la anécdota parece un tanto escasa para las casi trescientas páginas que tiene la novela. Sin embargo, esto no me parece demasiado importante porque creo que lo más relevante de este libro es cómo está contado, el lenguaje preciso y preciosista que utiliza, el detallismo con el que describe los elementos de la naturaleza de forma que creo que se podría hablar de escritura no solo realista sino naturalista. Ahora bien, esto que destaco como lo principal  y más sugerente me costó entrar en ello. De hecho creo que se trata de una novela que puede desesperar un tanto al principio ya que apenas pasan cosas y se dedica mucho espacio a esas descripciones, pero, al menos a mí me ha sucedido, llega un momento es que quedas atrapado por esa forma de contar y expectante sobre lo que les pueda pasar a los protagonistas. Unos protagonistas que son prácticamente solo los mencionados si añadimos a un amigo del padre.

De ellos se va obteniendo información de manera fragmentaria. Así, la madre, que tiene 26 años,  trabaja en el comedor de una empresa y también de limpiadora; es apasionada; tiene dudas y remordimientos; lee novelas románticas y roba una revista en el médico para quedarse con una reproducción para colgar de adorno en una pared. El padre vivió bajo la autoridad dura e inflexible de su padre; es tempestuoso e indomable y una especie de nihilista.

De los fragmentos de críticas que la editorial reproduce en la solapa me gustaría destacar algunas frases: “Un narrador que escribe como quien sigue las huellas frescas de un rastro”. “Seco, tajante, literal como los instintos y los hechos”. “Firma una historia de una potencia inusual”.

En fin, me parece que se trata de un texto que puede hacer que el lector se enganche, lo siga con verdadero interés intrigado por lo que puede pasar y disfrutando por la forma de narrar del autor. Sin embargo, también es un texto que, como ya advertía antes,  puede desesperar y hacer que el lector lo abandone a las primeras de cambio.

 

Jean Baptiste-Del-Amo, El hijo del hombre. Traducción Lydia Vázquez.

 

 

 

domingo, 3 de abril de 2022

Los negros en Europa



Otro libro más con el que la editorial Capitán Swing pone a nuestra disposición análisis y reportajes sobre temas que no son los habituales y con tratamientos que tampoco lo son.

Pitts es un escritor, presentador de televisión y fotógrafo inglés que se propuso conocer la realidad de las comunidades negras en diferentes lugares de Europa. Para ello hizo un viaje de más de cinco meses por diferentes ciudades y: “(…) las páginas de este libro reflejan el periplo en tercera clase de un viajero negro solo; es una odisea negra, independiente y de clase trabajadora”. (p. 17)

Un viaje hecho con poco dinero, alojándose en hostales baratos, comiendo en comedores sociales a veces o en bares donde comía la población con la que trataba ya que la clave del viaje era conectar con la gente, pues como afirma en la Introducción, lo que hace más inclusivo su trabajo son: “(…) los encuentros fortuitos con gente corriente y las entrevistas improvisadas con dependientes, vendedores ambulantes, agentes de turismo, estudiantes, activistas, músicos, trabajadores sociales especializados en jóvenes y muchas personas más con las que simplemente trabé amistad en cafeterías, bares, clubes sociales u hostales”. (p. 17)

En definitiva, no trata de elaborar ningún tipo de teoría, sino de reflejar un conjunto de realidades y hacerlo sobre todo mostrando a la gente que las vive. No solo escribe sobre lo que pasa hoy, de vez en cuando también aparece alguna referencia histórica que pueda ayudar a comprender mejor lo que pasa en la actualidad como, por ejemplo, cuando habla sobre la violencia racista que existía en la RDA, o cuando explica cómo se hizo para que en la liberación de París en la Segunda Guerra Mundial solo participasen militares blancos. No obstante, el núcleo de las informaciones está referido a lo que pasa ahora.

Por lo que se refiere a los temas estos van desde las expresiones culturales como la música o el arte, al activismo político o al cuidado de unos archivos particularmente interesantes, a partir del contacto con una gran variedad de personajes  Desde luego realidades totalmente desconocidas para mí y enormemente interesantes para tener una visión más completa de las realidades europeas.

Por dejar constancia de algunas de las elementos que aparecen en el libro y que pueden llamar más la atención:

París. Muy interesante la estancia en el barrio, la banlieu, de Clichy-Sous-Bois, uno de los lugares donde se iniciaron los conflictos en 2005.

Bruselas. El Museo Real de África Central y lo que cuenta de las historias de Tintín en el Congo.

Amsterdam. Mucha música, tema del que no entiendo nada, pero también la existencia de los Archivos Blacks y el New Urban Collective. También lo que explica sobre el Renacimiento del Harlem de Nueva York.

Berlín. Está mucho tiempo con el movimiento antifascista que no termina de convencerle y del que llega a decir: “Por esta razón, esa fiesta de malotes que estaba presenciando no parecía tanto una batalla contra el racismo como una ocasión para liberar el espíritu adolescente sin tener que sufrir repercusiones: se trataba de emborracharse y bailar con la excusa de estar defendiendo una buena causa”. (p. 201)

Estocolmo. Aquí conversa con una árabe y un griego para conocer la realidad de la inmigración. También visita Rankeby, un barrio socialdemócrata hoy abandonado a su suerte.

Marsella. Aquí dedica espacio a hablar de Baldwin, Fannon o McKay saliéndose un tanto del sistema del resto del libro.

Lisboa. El interesante bario de Cova da Moura.

Estos son algunos ejemplos de los lugares que visita y de los temas que aborda, siempre con la perspectiva de conocer cómo es la realidad de la gente negra que allí habita (el término negro lo utiliza a pesar de que en algún lugar explica que no es algo que le guste en la medida en que no cree en la existencia de las razas, además de la gran variedad de matices que tiene ese negro,  como le sucede a él mismo que es un mestizo con el pelo ensortijado).

En fin, un libro muy interesante y que, como decía al principio, aborda temas y muestra personas que no son las habituales en la información. Quizá, puestos a poner alguna pega, le falte un poco de sistematización que pueda facilitar obtener una idea global, pero no creo que sea esa su intención, pues ni siquiera dedica un espacio a sacar algunas conclusiones.

Acompaña el texto con algunas fotografías que no son especialmente útiles para un mejor conocimiento. Eso sí, deja la dirección donde se pueden ver todas las que hizo durante el viaje.

 

Johny Pitts, Afropean. Notas sobre le Europa negra. Traducción Miguel Marqués y María José Borrego.

 

 

 

 

 

 


jueves, 31 de marzo de 2022

Un buen inicio literario


Esta es la primera novela de Brown cuyo trabajo principal se ha desarrollado en el sector financiero, sector en el que trabaja la protagonista, una mujer negra millenial británica, esto es, con un gran parecido con la autora aunque ella afirma que no se trata de una obra de autoficción.

Es una novela corta, muy corta, de apenas 120 páginas, pero en la que Brown va soltando puñetazos y golpes duros a determinados comportamientos y actitudes. Así: acoso en el trabajo, preeminencia de los hombres en el mundo de la empresa, maltrato a la inmigración, casi imposibilidad de integración, diferencias sociales y culturales, etc. Y todo esto a través de una estructura fragmentaria porque como reconoce la propia autora:

“Sabía que la voz de la narradora sería el hilo conductor. Después fui componiendo los espacios que quería explorar, por los que quería que ella se moviera”. (En la reseña/entrevista de Carmen López en eldiario.es)

Esta estructura hace que a veces el lector, al menos yo, se pierda un poco y no sepa muy bien qué está pasando, pero queda compensado por los momentos en los que Brown arremete con fuerza como se puede comprobar en los siguientes fragmentos:

 “Este perpetuo acatar, alcanzar, superar: ¿para qué?” (p. 65)

 “Nacida aquí, padres nacidos aquí, siempre aquí y, sin embargo, nunca de aquí.”. (p. 71)

 “Aprenden la división entre países desarrollados y países subdesarrollados como si fuese mera geografía: tan incuestionable como las montañas, los océanos y los demás accidentes naturales. Sin porqués, sin las flechas despiadadas del imperialismo europeo rasgando el mapa del mundo”. (p. 103-104) 

“Con una finalidad pasmosa, los hechos de la historia británica no bélica del siglo XX se extirparon, se arrancaron de la memoria colectiva del país. Fueron suplantados. En su lugar, florecieron los difusos cuentos de hadas de un gobierno imperial benévolo”. (p. 112-113)

Por cierto, una protagonista que, a pesar de los problemas que tiene en el trabajo, va por colegios y universidades dando charlas sobre las ventajas de trabajar en grandes empresas.

Una novela interesante, con bastantes ideas y pensamientos, aunque con un solo personaje porque el resto que aparece no tienen verdadera consistencia incluyendo su novio.

En poco tiempo he leído varias primeras obras de jóvenes escritoras y no es esta la que más me ha impresionado aunque reconozco que apunta cosas.

Como suele suceder, las críticas que aparecen en la contraportada me parece que son un tanto exageradas.

 

Natasha Brown, Reunión. Traducción Inga Pellisa.

 

 

martes, 29 de marzo de 2022

ANDAMIO

Una entrega un tanto peculiar. Más cine que series y estas todas con total o parcial producción estadounidense. El cine, sin embargo, tiene variadas procedencias. En general, no hay demasiada calidad ni en uno ni en las otras; es una de las entregas más flojas que recuerdo, pero no siempre se acierta con la elección de lo que ver. No obstante, he pasado buenos momentos y hay dos o tres cosas realmente interesantes.  

 

Películas

 

The fallout. Película estadounidense sobre los efectos en un pequeño grupo de estudiantes que provoca un tiroteo con muertos producido en su colegio. Muy interesante porque se limita a mostrarlos aunque, lógicamente, se pueden sacar conclusiones de todo tipo y, desde luego, sobre el hecho de que se pueda disponer de armas con tanta facilidad. Buen guion y buenas interpretaciones sobre todo de la protagonista.

 

Sin respiro. Un thriller francés que me pareció ver que es un remake de una película coreana. Es entretenido para una tarde que se necesite desconectar, pero desde luego parece una película de lo que antes se llamaba la serie B.

 

Best sellers. Una producción canadiense aunque se desarrolla en Estados Unidos. Una editora que ha heredado una editorial que está a punto de quebrar y un escritor que tuvo un gran éxito hace cuarenta años y no ha vuelto a publicar, pero que tiene una novela preparada son los dos protagonistas de esta historia. Muy previsible todo lo que sucede aunque ambas interpretaciones lo hacen bastante llevadero.

 

Mediterráneo. Película española que cuenta la historia de Óscar Camps, el creador de la ONG Open Arms, cuando se fue a Lesbos a salvar migrantes en su travesía desde Turquía. Buena aproximación al personaje y, sobre todo, a la situación que se vivió en ese lugar. Momentos emotivos lógicos en una película sobre un tema así. Me ha gustado y es una pena que haya tenido tan poca difusión.

 

El sustituto. Una película policiaca española con los suficientes elementos para hacerla muy entretenida e incluso algo más al estar basada en hechos reales. De hecho creo que al final se podría decir perfectamente lo de  que  “de aquellos barros, estos lodos”. El año 1982 un policía llega a Denia para sustituir a otro que ha muerto. Allí se encuentra con una comisaría de policía al mando de un comisario franquista y en la que hay un inspector que le descubrirá la existencia de ese grupo de alemanes al que lleva tiempo investigando.

 

Kimi. Un thriller estadounidense dirigido por Steven Soderbergh con todos los ingredientes del género y algún elemento que recuerda algo a la serie Black Mirror. Es destacable también el trabajo de la actriz protagonista. Sin ser una gran película resulta bastante entretenida.

 

Aguas profundas. Adaptación estadounidense de una novela de la gran Patricia Higsmith. La peor con mucha diferencia de las adaptaciones que he visto de sus novelas. No se entienden bien algunos comportamientos y resulta bastante reiterativa y aburrida (dura casi dos horas). Esos sí, se cumple la idea que está detrás de toda su obra de que cualquiera puede ser un asesino.

 

Jinetes de la justicia. Una película danesa que toca varios géneros y que lo hace muy bien. En parte thriller, pero también, y sobre todo, comedia con mucho humor negro. Muy buenos intérpretes, un buen guion  y una estupenda puesta en escena. Otra demostración de la calidad del cine que se hace en ese país, un país que cuenta con magníficos directores.

 

Coda. El sonido del silencio. Película estadounidense que es un remake de una película francesa. Ayer mismo ganó el Oscar algo rechazado por gran parte de la crítica española. Evidentemente es una película para el gran público, no tiene aportaciones técnicas ni estilísticas, pero logra reflejar muy bien lo que supone una familia compuesta por tres personas mudas, el matrimonio y un hijo, y una hija que no lo es. Casi todo resulta previsible y, sin embargo, se ve con gusto y al final deja un buen ánimo. No sé si eso merece un premio como el Oscar, pero al menos sí el premio de que la vea la gente.

 

Series

 

Quédate a mi lado. Serie estadounidense de 9 episodios de duración muy variada. Está basada en una novela policiaca de Harlan Coben y, como todas las basadas en libros de este escritor, tiene un guion muy completo en el que dudas siempre entre varios personajes como responsables de los hechos. No es de lo mejor que se puede ver en este género, pero resulta entretenida y hace que te olvides de cómo está el mundo al menos por un rato.

 

Harlem. Serie estadounidense de 10 episodios de 35 minutos. La protagoniza un grupo de cuatro amigas treintañeras negras de clase media. Sus problemas con las relaciones de pareja, con el trabajo y con la familia que, salvo en algunos aspectos muy concretos, no son muy diferentes de los que ya hemos visto en otras series con grupos de mujeres blancas. Hay momentos interesantes que siempre tienen que ver con esos aspectos relativos al color de su piel. Resulta entretenida y, desde luego, muy interesante para quien se interese por la moda ya que las cuatro lucen modelitos distintos en cada aparición.

 

The afterparty. Serie estadounidense de 8 episodios de unos 35 minutos. Muy original. Hay un asesinato y en cada capítulo se da la perspectiva de cada personaje mediante entrevistas con la policía, pero con la particularidad de que se utilizan técnicas de diferentes géneros desde el de vida universitaria al de acción pasando por la animación. Buena parodia de muchas cosas y muy entretenida aunque a mí en algún momento me ha resultado algo irritante. No obstante valoro sobre todo la gran originalidad y un guion muy trabajado.

 

El turista. Miniserie coproducida por USA, UK y Australia. Tiene 6 episodios de casi una hora.  Se desarrolla en el outback australiano lo que garantiza paisajes muy espectaculares. Un magnífico guion con los suficientes giros para mantener la atención y convertirla en una serie que merece la pena ver.

 

Hacks. Serie estadounidense de 10 capítulos de unos 30 minutos. Es una comedia con algún elemento de drama que tiene como protagonistas a una monologuista de gran éxito, pero ya en el tramo final de su carrera, y a una joven contratada para colaborar en los guiones. Además, hay también algunos buenos papeles secundarios. Muy bien interpretada. Resulta muy entretenida y, además, va de menos a más.

 

Atlantic crossing. Serie de 8 capítulos de unos 50 minutos con participación de bastantes países en la producción. Se centra en el papel que desempeñó en Estados Unidos durante la segunda Guerra Mundial la princesa heredera Martha, esposa del que luego fue el rey Olav, papel que consistió en lograr apoyo económico y de armamento del presidente Roosevelt. Bastante favorable a la princesa y no tanto a su marido. Es entretenida y se conocen cosas que yo desconocía como, por ejemplo, la posible relación romántica entre Martha y el presidente.

Novelando a Rudolf Höss (Auschwitz)



Es curioso que se reedite este libro publicado por vez primera en 1952. En ese momento debió de tener un fuerte impacto porque lo que cuenta en la segunda parte pone los pelos de punta aunque a estas alturas de la historia todo es sabido y ha sido investigado y publicado en infinidad de libros.

Dice Merle en el Prefacio a la edición de 1972:

“La primera parte de mi relato es una recreación ampliada e imaginaria de la vida de Rudolf Höss, siguiendo el resumen de Gilbert (el psicólogo estadounidense que le interrogó en su celda). La segunda - donde, desde mi punto de vista, hice un verdadero trabajo de historiador- traza, según los documentos del proceso de Nuremberg, la lenta y titubeante puesta en marcha de la Fábrica de la Muerte de Auschwitz”. (p. 10)

Creo que aquí está la clave del interés que pueda tener hoy en día. Me refiero a esa recreación del personaje antes de que se convirtiese en el comandante de Auschwitz- Birkenau.

El texto está narrado en primera persona a modo de memorias de un tal Rudolf Lang, claro trasunto de Höss,  que va realizando catas en diferentes momentos de su vida; en aquellos que tuvieron relevancia para su futuro. Así:

1912. Su educación bajo la autoridad de un padre muy duro.

1916. Se alista con 16 años en los Dragones y combate en Turquía durante la Primera Guerra Mundial.

1918. Al finalizar la guerra se niega a estudiar teología y se alista en los Cuerpos Francos.

1922. Trabaja en una empresa hormigonera. Se afilia al partido y es condenado a 10 años de cárcel por asesinato. Pasará 5.

1929. Recupera una granja en la que trabaja. Se casa y entra en las SS.

1934. Pone en marcha el campo de Dachau en el que estará 5 años hasta que le envíen a montar y organizar Auschwitz.

Una vez llegado a este campo, todo lo que se cuenta ha sido contado, como advertía más arriba, muchas veces y muy bien, aunque es cierto que Merle es capaz de transmitir perfectamente cómo fue evolucionando y “mejorando” todo el proceso de aniquilación de los judíos que allí llegaban.

Un libro que puede ser interesante para quienes hayan leído poco sobre el tema, pero que también tiene el interés de ver cómo se puede llegar a actuar como lo hizo el protagonista justificando toda su actuación en nombre del deber, algo que a Merle le parece especialmente monstruoso.

Quizá un libro que hoy no sea tan necesario, pero que tampoco sobra.

 

Robert Merle, La muerte es mi oficio. Traducción Ernesto Kavi.

 

 

domingo, 20 de marzo de 2022

Aproximación a la literatura india



Tengo un desconocimiento enciclopédico de la literatura india, apenas el famoso en su día Hijos de la medianoche de Rushdie (y este seguramente por la polémica que se generó en torno a él), uno de Roy y otro de Singh. Además, por lo que comenta la traductora en la magnífica introducción que hace al libro, la inmensa mayoría de los publicados en occidente fueron escritos originalmente en inglés, mientras que este de Manto lo fue en urdu desde donde se ha traducido para esta edición.

Sobre el estilo del autor se dice en la introducción: 

“Manto se guía por el modelo de los autores realistas franceses y rudos que tanto había leído, y escribe con un estilo directo, haciendo uso de la tercera persona, empleando una trama bien estructurada, y recurriendo con frecuencia a los finales inesperados.

(…)

La novedad de su obra no se debe tanto al estilo como a los temas que aborda”. (p. 22-23)

Temas que, en el caso de los dieciocho relatos que se han seleccionado para esta edición, se pueden resumir en: la prostitución o el tema sexual en general, la política centrada sobre todo en la partición tras la independencia y en algunos problemas anteriores a esta, otros se centran en el protagonismo de los niños y el volumen se cierra con dos que tienen un tono más poético.

Parece ser que por alguno de los temas que trataba en algunos de los más más de 240 relatos que publicó, fue detenido y condenado por inmoral. Claro, habría que conocer cómo era la sociedad de la época en que publicaba que son los años 30, 40 y primera mitad de los 50. Por cierto que en esta edición no hay ninguna referencia a la fecha en que fueron publicados.

Vistos los temas hay que decir que en ellos hace crítica social cuando escribe, por ejemplo, de la creación de sindicatos de facinerosos o de lo que roban los ricos; también crítica política cuando escribe sobre una ley de 1935 que pretendía dar mayor autonomía a los territorios pero que no cambió nada y, desde luego, cuando habla sobre la matanza de Amristar. Algo que llama la atención en todos los relatos es la gran sensibilidad que demuestra Manto y el cuidado, no exento en muchos casos de cariño,  con el que trata a la mayoría de sus personajes.

Para mí ha sido una gratísima sorpresa la lectura de este libro. De los dieciocho relatos que lo componen solo hay un par que no me han gustado demasiado, pero con el resto he disfrutado y me ha hecho tener sensaciones muy diversas desde la emoción a la indignación.

Debió de ser un personaje peculiar pues murió relativamente joven, a los 43 años, por la mala vida que llevaba dependiente del alcohol y con tan poco dinero que, como cuenta la traductora, escribía con mucha rapidez e incluso alguna vez llegó a escribir alguna historia de una sentada en la editorial para así poder cobrar y poder comprar bebida.

Creo que merecería la pena que se publicasen más relatos porque tienen interés y calidad tanto literaria como humana.

Para terminar dejo un fragmento, reproducido en la introducción,  muy significativo de su pensamiento:

“La India se había independizado. Había nacido Pakistán, pero en esas dos naciones el hombre era  un esclavo. Esclavo del fanatismo, esclavo de la locura religiosa, esclavo de la bestialidad y la barbarie”. (p. 33)

Hay una reseña muy buena y muy completa de Jesús Aguado en elpais.com.

 

Saadat Hasan Manto, Diez rupias. Historias de la India. Traducción Rocío Moriones Alonso.

 

 

 

 

jueves, 17 de marzo de 2022

La convivencia como prioridad.


Conozco al autor desde que empezó a participar en las tertulias de la cadena SER. En un momento dado entraron varios contertulios nuevos y fue Corredor el que más me sorprendió. Me gustaron de él varias cosas: era tranquilo, daba mensajes claros y mesurados, respetaba los turnos de palabra sin interrumpir y era progresista (por cierto, qué pena da lo que está sucediendo con este concepto “gracias” a VOX). Luego volveré sobre las tertulias.

Cuando vi su libro en la librería, con un título además tan atractivo no dudé, en estos tiempos tan alborotados la tranquilidad y la llamada a la convivencia me parecen dos valores cruciales. Tanto el tono general del texto como los principales contenidos abundan en ambas ideas.

Corredor va mezclando, a lo largo de las 188 páginas del libro, elementos autobiográficos con descripciones y análisis de la realidad política y social de nuestro país. Así, trata temas como: Catalunya, los medios, el sistema político, el papel de Felipe VI o la Administración, entre otros. Suele comenzar cada uno de los ocho capítulos en los que ha dividido el texto con un repaso a momentos históricos que aprovecha para sacar algunas enseñanzas aunque son breves no dejan de tener su carga de profundidad.

De los aspectos biográficos yo destacaría sus sucesivas participaciones en grupos que pretendían, y pretenden, establecer debates sosegados entre las diferentes posturas políticas como el que creó en la universidad, deba-t.org, o +Democracia en el que está inmerso en estos momentos. Menciona a gente que participó en ellos y que luego ha llegado a puestos de relevancia.

Hablando de menciones, me ha resultado muy curioso cómo de la mayoría de las personas mencionadas por diferentes razones suele poner a continuación entre paréntesis de quién se trata y/o qué ha sido después de ellas. En este sentido me ha llamado particularmente la atención lo que comenta de dos personas bien conocidas:

“Fernando Berlín (un periodista innovador que consolidaría tiempo después su posición como icono de la izquierda de la izquierda).” (p. 46).

”Eduardo Inda (con quien años después coincidiría semanalmente en televisión.” (p. 68)

De las diferentes partes del libro se pueden sacar interesantes enseñanzas, pero tengo que reconocer que a mí lo que más me ha gustado es lo que cuenta sobre las tertulias. Soy oyente diario, aunque cada vez menos, de algunas de la radio como las dirigidas por Barceló, Otero y Bretos, y por eso me interesa, porque, además, creo que los medios son en este momento el lugar donde se libra la principal “batalla” de las ideas. (Siendo emplear precisamente en estos días un concepto tan bélico, peo no se me ocurre otro mejor).

Corredor explica muy bien cuáles son sus objetivos cuando acude a una tertulia que resumo: Transmitir lo que ha preparado antes (dice que dedica una hora o tres si es una tertulia de larga duración); contribuir a bajar la emocionalidad  y dar herramientas para comprender mejor lo analizado; y generar complicidad con los contertulios. He de decir que suele conseguirlos y que es esto, precisamente, lo que me llamó la atención como decía al empezar el comentario.

Como se trata de un manifiesto a favor de la convivencia, reproduzco un fragmento en el que se explica muy bien: 

“Convivir es, sobre todo, responder a la pregunta de qué harías con el que es distinto a ti. Y es el principal objetivo político que deberá tener cualquier gobernante que aspire a representar al conjunto de la sociedad. Ya sea por sus propias convicciones democráticas o porque entienda que sin convivencia no habrá paz social, no habrá estabilidad económica y no habrá capacidad de progresar”. (p. 157)

Para terminar solo dos cosas puntuales. Por un lado, la preocupación que dejan los datos que da sobre lo que opinan los jóvenes. Así, solo el 20% confía en el Congreso, menos del 14% en los partidos y no llega al 20% en el gobierno. Con estos datos el futuro se presenta cuanto menos problemático. Por otro lado, una frivolidad.  Afirma que “San Sebastián (una ciudad preciosa, pero no más que Santander, Ciutadella de Menorca o Palma de Mallorca)”. Vivo en Palma desde 1984 y siento tener que reconocer que es una ciudad que está muy lejos de parecerse a cualquiera de las mencionadas. El autor ha debido de tener alguna experiencia especialmente positiva para ponerla al mismo nivel.

En fin, un libro que se lee con gusto y del que se pueden aprovechar bastantes informaciones y, sobre todo, reflexiones.

 

Nacho Corredor, El activista tranquilo. Un manifiesto subjetivo a favor de la convivencia.