domingo, 11 de mayo de 2025

ANDAMIOS

 

Una entrada bastante regular no sé si por la preponderancia de producciones estadounidenses. De hecho lo que me ha parecido más interesante no es de esa procedencia.

 

Películas

 

A real pain. Producción estadounidense. A medio camino entre la comedia y el drama con el tema del Holocausto como fondo. Gracias a su simplicidad y su huida de la trascendencia, resulta bastante creíble más allá de ciertas excentricidades del coprotagonista. Una ópera prima que deja buen sabor de boca.

 

Marco. Producción española. Basada en la novela de Javier Cercas que cuenta la historia de este mentiroso compulsivo que se hizo pasar por deportado en un campo de concentración nazi. La película narra bien la historia y, sobre todo, cuenta con una interpretación realmente espectacular de Eduard Fernández.

 

The apprentice. Producción canadiense. Se centra en los primeros años del ascenso de Donald Trump en el mundo de los negocios. Aunque hay algunos críticos que hablan de cierto blanqueo del personaje, a mí me parece que lo que se cuenta de él ya en esos primeros años ayuda a entender el desagradable personaje en el que se ha convertido. Como en la película anterior, esta cuenta también con una sobresaliente interpretación del protagonista.

 

Series

 

The White Lotus. Tercera temporada de esta serie estadounidense con 8 episodios de 55 minutos. Sigue la estela de las anteriores. Lujo para gentes de clase alta en lugares “de ensueño” en los que en algún momento termina habiendo una tragedia. Esta se hace esperar bastante aunque, a pesar de todo, el espectador se entretiene aunque solo sea viendo lo estúpidos e inconsistentes que pueden ser los ricos. (Consuelo de espectador pobre, claro).

HBO

 

Shetland. Séptima temporada de esta serie británica con 6 episodios de 55 minutos. Otro caso para Jimmy Pérez, esta vez con tres muertos y el eco-terrorismo de fondo. Siendo entretenida como siempre, la verdad es que ya se me ha hecho un tanto cansina. Creo que a los productores y al propio actor protagonista también. La serie sigue pero ya sin él. Yo la abandono.

Filmin

 

The pitt. Serie estadounidense de 15 episodios de 50 minutos. El trabajo en las urgencias de un hospital de Pittsburg. Los dos primeros capítulos no me engancharon, pero poco a poco lo ha ido haciendo porque el guion y una realización realmente magníficos merecen la pena. Evidentemente hay muchas, a veces demasiadas, exageraciones y algunas cosas bastante poco creíbles, pero el resultado final es francamente bueno.

Al terminar, sobre todo por los últimos capítulos, no pude menos que pensar en cómo habrá sido la situación en los hospitales de la Palestina masacrada por Israel.

Max

 

Black mirror. Séptima temporada de esta serie británica con 6 episodios de 50 minutos. Recuerdo que alguna de las anteriores me había decepcionado, pero reconozco que esta tiene un primer episodio realmente bueno. El resto está bastante bien excepto el último que además de demasiado largo no me ha interesado en ningún momento. En general la media es bastante buena.

Netflix.

 

We are Lady Parts. Serie británica de 5 episodios de 25 minutos. Aunque tiene muy buenas críticas y el tema me parece interesante, un grupo de jóvenes musulmanas crean un grupo de música punk, la verdad es que no he entrado en la serie salvo en algún momento muy puntual; por lo general me ha resultado aburrida.

Filmin.

 

Ladrones de drogas. Serie estadounidense de 8 episodios de 45minutos. Es un thriller, basado en una novela, con un inicio bastante original y unos primeros capítulos entretenidos, pero que, poco a poco, va perdiendo interés y dejando demasiadas cosas sin explicar. Eso sí, se desarrolla en Filadelfia lo que no es habitual en las series de ese país.

Apple tv +

 

El largo río de las almas. Serie estadounidense de 8 episodios de 50 minutos. Basada en una novela, se desarrolla en Filadelfia como la anterior y también en barrios bastante depauperados. Como thriller no resulta especialmente interesante, pero como drama sí que lo es. Muy bien interpretada y con un tono muy adecuado a lo que está contando. Me ha gustado más de lo que esperaba.

Movistar +

 

La canción. Miniserie española de 3 episodios de 45 minutos. Es una recreación de cómo se gestó la participación de Massiel en el Festival de Eurovisión de 1968. Está bien para ver el contexto sociopolítico y también algunos intríngulis de los medios. Buenas interpretaciones sobre todo del actor que interpreta a Artur Kaps. Destacar que dura lo que tiene que durar, lo que es muy de agradecer.

Movistar+

sábado, 10 de mayo de 2025

La intimidad de las élites

 

Para la investigación, Delpierre trabajó alguna temporada en casas de ricos, pero la base de la investigación son un conjunto muy amplio de entrevistas con trabajadoras (sirvientas) y trabajadores (sirvientes), así como con sus empleadores tanto aristócratas como multimillonarios o milmillonarios.

Parte la autora de la siguiente idea:

“(…) mi investigación precisamente ha consistido en subrayar la complejidad de los mecanismos del servicio doméstico, de la dominación cercana, de la explotación dorada…”. (p 217)

Porque, efectivamente, el lector se va dando cuenta a lo largo del libro de esa complejidad y de los diferentes aspectos que intervienen en esa relación. De hecho, aunque la autora no lo menciona, he tenido en más de un caso la sensación de que había lo que se conceptúa como “síndrome de Estocolmo”. De hecho, hay una idea en algunos casos de “vivir en el paraíso” por los sueldos, incentivos, regalos, viajes, médicos, vivienda, etc., de que disponen. (Hay al final una larga cita de una sirvienta sudafricana negra que es un verdadero alegato a favor de los patrones y denunciando las pocas ganas de trabajar de sus compatriotas).

En esta línea de visión positiva, alguna opinión:

“Sin embargo, la insistencia con la que las sirvientas idealizan su vida y su trayectoria resulta muy llamativa”. (p. 47)

Claro que también hay visiones diferentes:

"También les molesta que no las miren, que ignoren su sufrimiento, que no sepan de qué color tienen el pelo, los ojos o cuánto miden”. (p. 136)

Delpierre, de alguna manera tercia con fragmentos como el siguiente:

“Al afirmar que situaciones laborales violentas y en ocasiones ilegales – o al menos poco ventajosas- merecen la pena, las sirvientas subrayan de manera indirecta la miseria de una condición colectiva; la de las clases populares, la de las mujeres, la de los inmigrantes o las personas racializadas”. (p. 174)

O también con esta particular visión de los empleadores: 

“Las grandes fortunas pretenden que sus empleadas sean apasionadas, que no sirvan por dinero, sino por placer y entrega”. (p. 198)

Todo esto no hace sino manifestar esa complejidad que se mencionaba más arriba.

En definitiva, un libro muy interesante porque, además, la autora reproduce bastantes fragmentos de las entrevistas con lo que el lector puede incluso sacar sus propias conclusiones. Tango que decir que a mí algunos casos me han provocado verdadera tristeza por el tipo de vida y la anulación de la personalidad.

No quiero terminar el comentario sin dejar constancia de una frase de la autora que me parece equivocada e injusta:

“Como es bien sabido, las tareas del hogar y de la crianza recaen siempre en las mujeres”. (p. 88)

Ese siempre es la clave. Claro que es mayoritariamente así, pero somos muchos los que hemos asumido otro papel en el hogar y en la crianza. El mundo está cambiando en este tema aunque lo haga lentamente.

Hay una buena reseña de Sara Vicente en eldiario.es.

 

 

Alizée Delpierre, Servir a los ricos. Una mirada crítica a la intimidad de la élite social y económica. Traducción Palmira Feixas

 

 

 

jueves, 8 de mayo de 2025

Novelón

 

Cuando hace ya más de doce años leí Sobre una tierra ardiente, un libro de relatos de este autor, acudí rápidamente a comprar este que ahora comento dado lo mucho que me había gustado. Lo dejé en el estante de pendientes y, por su elevado volumen, tiene 885 páginas, he tardado mucho tiempo, demasiado, en ponerme a leerlo. (Suelo leer solo un “tocho” al año).

Der Níster (“El Oscuro”) es el pseudónimo de un escritor ucraniano que murió en 1950 en el gulag por las malas condiciones de vida antes de que le fusilaran que era la orden que había. En 1939 se publicó este primer volumen en la Unión Soviética; el segundo solo lo haría en Estados Unidos en 1948.

Estamos ante un gran libro que cuenta la historia de esa familia a finales del siglo XIX. Una familia judía de tres hermanos que habita una pequeña población de Ucrania. Pero también es el reflejo de la vida en esa ciudad y de sus gentes. La familia la componen tres hermanos muy diferentes en todo: uno dedicado a los negocios, casado y con hijas; otro centrado en la religión y el tercero con problemas de discapacidad mental. También tiene gran protagonismo un peculiar personaje que se acerca a la familia y que tendrá gran influencia en muchas de las cosas que les pasan.

La novela tiene en muchos momentos casi carácter de estudio etnográfico como cuando relata bodas y entierros o describe la feria dedicada al nacimiento de la Virgen Inmaculada. No obstante, lo más destacable es la gran creación de personajes que hace. Además de los ya mencionados de la familia hay una serie de ellos que va apareciendo en los distintos sucesos que acontecen que son realmente magníficos y están muy bien construidos.

También creo que merece destacarse el narrador colectivo porque es algo poco habitual. Un narrador que tiene intervenciones como la siguiente:

“Esa conversación se había producido, y ahora no entraremos en sus detalles porque nos llevaría demasiado tiempo, pero volveremos a ella más adelante.” (p. 197)

Der Níster plantea en el Prefacio su intención:

“Me he aferrado, al componer este libro, al método del realismo artístico, aquel que se identifica con el famoso mandamiento de Goethe: “Pinta, pintor, y calla”, con la plena confianza de que lo requerido y lo deseable para el fin perseguido se pondrá de manifiesto por sí mismo, solo por el hecho de haber sido pintado con fidelidad, es decir, desde la lógica interior de los destinos de aquellas personas.” (p. 23)

Efectivamente, así es a lo largo de toda la novela en la que, además,  demuestra una gran capacidad y agilidad narrativa. Solo en algún momento puntual se me ha hecho algo dura la lectura teniendo en cuenta la extensión.

Hay menos texto dedicado a reflexiones sobre el judaísmo de lo que me temía. De hecho hay muy pocas como tal aunque, evidentemente, toda la vida de la ciudad gira en torno a las festividades religiosas. El autor creo que no era una persona especialmente religiosa; esto dice uno de los personajes principales:

“Porque quiero hablar con franqueza: ¿quién está en condiciones de soportar una devoción tan ardiente, comparable a la lepra, que produce picazón y al mismo tiempo placer al rascarse, aunque en realidad se trate de un parásito, y sobre el cual a cualquiera que te importe deberías aconsejar que antes que nada se desinfecte y procure liberarse, tanto del picor como del ilusorio placer” (p. 665-666)

En fin, un libro muy recomendable para el que, eso sí, hay que disponer de tiempo por su extensión y estar editado además en formato grande. Hablando de edición quiero destacar la magnífica traducción y el hecho de que solo he encontrado dos erratas, sin importancia ninguna de las dos.

 

Der Níster, La familia Máshber. Traducción del yiddish de Rhoda Henelde y Jacob Abecasis

jueves, 1 de mayo de 2025

Ajuste de cuentas

 

Tengo que empezar este comentario con algo de mi historia personal. Fui apoderado de Podemos en las dos primeras elecciones en las que se presentó (en la tercera estaba enfermo). Apoyé con créditos personales y alguna subvención que luego mantuve mensualmente durante un par de años. El responsable de mi compromiso fue Pablo Iglesias y sus intervenciones en la televisión; también lo fue de mi posterior abandono del partido. “¿Cuándo se jodió el Perú?” Esa es otra historia que ahora no toca.

El libro está dividido en 19 capítulos. Todos comienzan con una introducción del tema que van a tratar hecha por Irene Zugasti, una periodista y politóloga que tuvo cargos en el Ministerio de Igualdad y actualmente participa en Canal Red, que es, además, la que mantiene con Iglesias las conversaciones que componen el libro en el que las intervenciones de este se recogen, sin solución de continuidad, en la segunda parte de cada capítulo. Se pretende con esta forma narrativa que las ideas sean más claras y la lectura más ágil.

Hay capítulos dedicados a un solo personaje como, por ejemplo, entre otros: Antonio García Ferreras, Felipe VI, Felipe González o Pedro Vallín. Otros se centran en una serie de temas como pueden ser: los jueces, las redes sociales o el rojipardismo, en los que, evidentemente, también aparecen multitud de personajes.

Lógicamente es muy difícil resumir y comentar el contenido de un libro como este y tampoco tendría mucho sentido. Cada capítulo merece su comentario, así que lo haré de los que me han llamado más la atención.

Hay varios capítulos y varias ideas en las estoy totalmente de acuerdo con el autor. Así, en su visión de algunos jueces y sus actuaciones políticas, en sus críticas a gente como Victoria Prego, Ana Rosa Quintana, Pablo Motos o Juan Luis Cebrián, por citar solo a algunos. Pero por encima de todo comparto plenamente la idea que atraviesa todo el libro sobre la importancia política de los medios de comunicación que puede quedar resumida en esta frase: “La batalla cultural se hace desde la comunicación”.

La creación de espacios como La Base y actualmente Canal Red muestran el valor que le da Iglesias a este tema. Tengo que decir que hace muchos años que tengo esa misma idea gracias a mis lecturas de Ignacio Ramonet y Pascual Serrano.

Por otro lado, hay sin embargo otros planteamientos con los que estoy en completo desacuerdo como, por ejemplo, en sus críticas a quienes trabajan en medios que no le gustan o que directamente detesta, sin entender, en mi opinión, que también en ellos se puede dar la batalla cultural y, me atrevería a decir, que incluso mejor porque llegan a un público más amplio y no al de los ya convencidos.

Tampoco me gusta la forma de “saldar cuentas pendientes” con gente como Pedro Vallin o Daniel Bernabé. Por cierto que a este le mete en el grupo de los rojipardos en el que no aparece el nombre de Manuel Monereo que es para autores como Steven Forti, quizá uno de los mejores conocedores del tema, el principal representante en España de esa tendencia.

Finalmente, tampoco creo que el subtítulo del libro se ajuste a la realidad. La derechización es algo que se está produciendo en toda Europa y no sé si en todos esos países hay un grupo de “progres” (en la terminología del autor) que la estén propiciando. Es algo bastante más complejo e Iglesias, que otra cosa no será, pero inteligente lo es un rato, lo sabe perfectamente.

Para terminar el comentario un par de cosas más. No creo que la utilización de “se dice” o “cuentan en Córdoba” sea demasiado correcta porque no deja de ser caer en lo mismo que se está criticando. Tampoco me parece demasiado acertada, aunque pueda entenderla, la constante mención de Irene Montero en frases como, por ejemplo, “Para este tipo de personajes, el feminismo, lo que representan gente como Irene Montero…”, en las que podría elegir muchos otros nombres.

Quedan muchos temas y personajes fuera del comentario, pero ya se ha hecho demasiado extenso.

En general, es un texto interesante para conocer mejor a uno de los políticos más relevantes de los últimos tiempos. Además, se lee con extrema facilidad y, por qué no decirlo, tiene hasta su morbo para ver con quién se mete y de qué manera lo hace.

Como resumen, y volviendo a lo que decía al inicio del comentario, su lectura no ha hecho sino confirmar lo que me llevó a la salida de Podemos.

 

 

Pablo Iglesias, Enemigos íntimos. Cómo entender la derechización de España a través de sus personajes clave.