viernes, 31 de mayo de 2013

Buena e interesante primera novela




Con tan poético título se presenta la primera novela de una jovencísima autora nacida en Bakú, pero que escribe en alemán. Sorprende que sea eso, una primera obra, pues tanto la facilidad narrativa, como el ritmo, los personajes, las situaciones,…revelan bastante dominio de la escritura.
Historia de amor, pero mucho más ya que por sus páginas aparecen conflictos como los de Nagorno Karabaj, Armenia u Oriente Medio (Israel-Palestina), las dificultades de la inmigración en Alemania o las diferencias religiosas e idiomáticas como fuente de enfrentamiento. Como se ve, una serie de temas actuales a los que se enfrentan personajes como Masha, la protagonista, y una serie de jóvenes de 20 a 30 años.
Novela que se lee de un tirón, muy entretenida y también, por qué no decirlo, aleccionadora sobre los temas y situaciones que he mencionado, con el interés añadido de la edad de sus protagonistas que no es la habitual en las novelas que suelo leer.
 
Olga Grjasnowa, A los rusos les gustan los abedules

miércoles, 29 de mayo de 2013

Original novela italiana



Primera novela del autor y, parece ser, muy premiada. Es una rara mezcla de historias de jóvenes, aparentemente marginales, con la situación política de la Italia de 1978 (durante el secuestro de Aldo Moro).
A mí, tanto los primeros como los últimos capítulos me han resultado muy interesantes, y por momentos me han introducido en la historia lo que, por otra parte, no es demasiado fácil tanto por la escritura de Vasta como por la propia historia. Sin embargo, la parte central de la obra me ha costado bastante y creo que al autor le cuesta empezar el verdadero objeto de la novela.
Me ha gustado especialmente la forma narrativa y el cuidado lenguaje que utiliza, aunque resulte un tanto chocante oír según qué en el personaje que cuenta la historia en primera persona y que es un niño de 11 años. No es muy verosímil lo que ocurre, pero como se comenta en la contraportada, se trata de una parábola de la situación de Italia.
Dejo a continuación dos enlaces bien diferentes. En uno se hace un alegato a favor de la novela muy apasionado; en el otro se hace una crítica más matizada con la que estoy más de acuerdo. Este empleo de enlaces que no solía utilizar antes, lo estoy haciendo últimamente cuando creo que hay visiones muy diferentes de la mía o cuando encuentro un texto interesante.
Por cierto, a mí me ha recordado en muchos momentos al Juan Marsé de,  por ejemplo, Rabos de lagartija

Giorgio Vasta, El tiempo material

martes, 28 de mayo de 2013

Mucho más que un documental

Quien quiera pasar hora y media sin separarse de la pantalla, hipnotizado, emocionado, sorprendido, atrapado..., que no deje de ver este documental producido en Suecia sobre un músico americano de los setenta y... Sobre todo, una recomendación: verlo sin buscar previamente ninguna información.

La importancia del lenguaje



Interesante librito, 170 páginas, sobre la importancia que tiene el lenguaje en la política. No aporta grandes novedades, pero resume muy bien lo que se está publicando en los últimos años y, además, en lo que constituye lo mejor del libro, pone ejemplos muy interesantes extraídos de un estudio empírico que ha hecho el propio autor a partir de la realización de 1000 entrevistas.
El libro va separando lo que es pensamiento conservador y pensamiento progresista, con el que, dicho sea de paso, se identifica Arroyo (de hecho trabajó para el gobierno de Zapatero en diversos cometidos) y mostrando cómo, lo más importante, es el marco en el que se produce el lenguaje, esto es, los esquemas de interpretación previos que organizan la experiencia y dan significado. El mencionado trabajo empírico está dedicado precisamente a eso, a demostrar la importancia del marco, el frame.
Recomendable para interesados en la educación y en la política porque se puede apreciar la relevancia que tiene lo que decimos y, sobre todo, cómo lo decimos, así como también ver ejemplos claros de lo fácil que resulta ser la manipulación.
 
Luis Arroyo, Frases como puños. El lenguaje y las ideas progresistas

domingo, 26 de mayo de 2013

Artículos interesantes

Buen artículo de Fernando Vallespín sobre todo en su primera parte. Creo que tiene razón en lo que dice de la historia.

Juanjo Millás escribe sobre Aznar, ese personaje, que no persona, capaz de extraer lo peor de nosotros. (Gabilondo dixit).

Soledad Gallego escribe sobre la enseñanza de la religión y lo s acuerdos con el Vaticano. Muy bueno.

Javier Marías cuenta una curiosa historia de una petición para participar en la publicidad de la "marca" España. Hay un par de frases espléndidas en el texto.

Información sobre otro ejemplo más del despilfarro absurdo de los últimos años.

viernes, 24 de mayo de 2013

Felicidades (72) a uno de los genios musicales del siglo XX

De aquella época cualquiera es buena, luego ha habido un poco de todo.

miércoles, 22 de mayo de 2013

Relatos diferentes sobre el Holocausto



Un libro de relatos, 13, sobre un tema que es habitual en mis lecturas, el Holocausto, pero que al mismo tiempo es muy diferente de otros leídos por varios motivos: son recreaciones literarias a partir de hechos reales pero no autobiográficos (el autor nació en 1936); sus protagonistas son mayoritariamente mujeres que cuentan la historia en primera persona remontándose casi siempre a los abuelos, de esta forma se convierten en historias familiares; no aparecen prácticamente personajes alemanes nazis; se desarrollan fundamentalmente en Polonia, pero también en Rusia, Lituania, Alemania, Hungría, Estados Unidos…; tratan en dos relatos del estalinismo, etc.
Los relatos se ve que están muy trabajados, de hecho hay alguno que, por las fechas que aparecen al final, ha tardado ocho años en concluirlos. Esto se hace más palpable por la aparente sencillez de la forma de contar a partir de frases cortas, sencillas, directas, pero que llevan detrás un gran esfuerzo de composición. (Se puede apreciar el estilo en los textos que vienen al final del comentario)
Dos aspectos no tan positivos pueden ser, por un lado, la complejidad que en muchos momentos existe por la cantidad de nombres que aparecen y en un idioma tan difícil como el polaco y, por otro lado, aunque esto puede ser también positivo, la diferente sensación que dejan, esto es, si los primeros se leen con un cierto distanciamiento (no sé si es ese el propósito del autor  o mi particular momento como lector), a partir de un determinado relato se hace cada vez más patente el horror.
Me ha gustado especialmente la crítica que hace a la sociedad polaca de la época. (Uno de los textos que pongo a continuación es un buen ejemplo de ello.)
En definitiva, un libro complejo, completo y muy diferente de los habituales sobre el tema que resulta muy recomendable. Además, Grynberg que huyó en 1967 a los Estados Unidos, ha escrito toda su obra en su idioma polaco original.
Henryk Grynberg, Drohobycz, Drohobycz
 

 
“En cuanto los alemanes entraron, obligaron a los judíos a abrir sus tiendas y a los polacos les dijeron, coged lo que queráis. Vino a toda prisa gente de los alrededores y se lo agenciaron todo, hasta el papel de empaquetar. Los dueños debían salir y no aparecer por allí.” (156)
 
“Eran judías, pero es que cuando los judíos están solos, entonces ésta es polaca, ésa es checa, aquélla es húngara, con más ahínco que en ningún otro lado.” (158) (Recuerda mucho a Primo Levi)
 
"De las mil que éramos en nuestro grupo, sólo llegamos a Bergen-Belsen doscientas ochenta. Allí nuestro trabajo se limitaba a sacar  cadáveres de los barracones y arrastrarlos hasta un montón. Para eso habíamos caminado durante seis semanas a través de campos en los que la mayoría de nosotras perdió la vida. Cuando arrastrábamos la cantidad suficiente de cadáveres, nos daban sopa. Había trabajo en demasía. Por realizarlo recibíamos sopa y tifus. Me desmayé por la sed y me desperté con la boca seca. Yacía junto a un depósito de agua que no podía beber porque estaba infectada de tifus. Todos lo sabían, nadie bebía, se morían de sed.” (150)
 
 

domingo, 19 de mayo de 2013

Artículos interesantes

Soledad Gallego trata un tema que en los últimos días me tiene más que indignado: la evasión fiscal. Desde el 30 de abril mi madre, 98 años, tiene retenidos en su cuenta del banco 262 euros por embargo de la Agencia Tributaria por impago del segundo plazo del IRPF de ¡2009! Aún no he logrado obtener la comprobación en el banco de que así fue, pero en cualquier caso sorprende que se combata la evasión fiscal con ese tipo de medidas. Realmente, estamos en manos de la peor clase dominante posible, porque además se trata de eso, de una clase dominante y mandona e impresentable e iletrada y...
 
Josep Ramoneda sigue con su acertada crítica del sistema con la que siempre estoy de acuerdo.
 
Manuel V. Gómez explica las dos vías que se están planteando para ajustar las pensiones. Como pensionista estoy encantado, una vez más, con este gobierno.


Por todo lo anterior no me queda más que dejar la viñeta de Forges. Dedicada al gobierno y demás.

viernes, 17 de mayo de 2013

Una Memorias un tanto diferentes



Solo he leído dos libros de Hitchens, Cartas a un joven disidente y Dios no es bueno, que me parecieron muy interesantes. Al aparecer sus Memorias me llamaron la atención aunque he esperado a que se publicasen en la edición de bolsillo.
No se puede decir que me hayan defraudado, pero sí que esperaba más de ellas; echo en falta, por ejemplo, más información sobre sus estudios y sobre su labor profesional (medios en los que ha trabajado). En un libro de este tamaño, 500 páginas densamente editadas, es lógico que no todo tenga el mismo interés sobre todo para quien, como es mi caso, no conoce apenas la autor. En este sentido los aspectos y temas que más me han llamado la atención han sido: la relación con sus padres de niño, sus estancias en Cuba, Praga y Portugal y las reflexiones sobre Mesopotamia con su defensa de la guerra de Irak (aunque creo que comete algunos errores). También me han interesado sus comentarios sobre algunas de sus relaciones de amistad como, sobre todo, las que tuvo con Martin Amis o Edward Said.
En fin, como se ve una gran variedad de temas en la vida de un personaje que evolucionó desde un trotskismo inicial, hasta no se sabe muy qué ya que no he sido capaz de entender dónde se situaba en los últimos años. Un último comentario sobre su escritura. A mí me ha resultado un tanto espesa en varios capítulos aunque reconozco que es un buen escritor.
 
Christopher Hitchens, Hitch-22. Memorias

jueves, 16 de mayo de 2013

Esperando comentarios

Pronto hará cuatro meses de la presentación de Gracias a todos y, por lo tanto, ha pasado el tiempo suficiente para que los que lo tienen hayan podido leerlo o al menos echarle un vistazo. La gran mayoría de los que lo recibieron suelen entrar de vez en cuando en el blog, y si alguno que entra no lo tiene ya sabe que puede conseguirlo.
Todo esto viene a cuento de mi petición hecha el día de la presentación, y que ahora reitero, de recibir por vuestra parte opiniones y comentarios sobre lo que os ha parecido el libro. Desde entonces sólo he recibido dos de tipo general y varias de una misma persona que lo comenta de forma minuciosa. Sé lo difícil que resulta ponerse en un blog a hacer comentarios, pero si vuelvo a ponerme pesado con el tema es porque uno de los sentidos que tenía hacer y entregar el libro era ver cómo era recibido, qué tipo de reacciones suscitaba, qué interesaba a mis amigos, si disfrutaban con lo mismo que yo, etc.
No se trata de hacer un extenso comentario, sino de contar cosas como: qué os ha parecido en general, qué concepto os ha resultado más interesante, qué nivel de acuerdo o desacuerdo habéis tenido con mis comentarios, qué autor os ha parecido más interesante,…o lo que os apetezca decir. En fin, tras esta reiteración espero tener algo más de suerte y, en cualquier caso, gracias a todos.

miércoles, 15 de mayo de 2013


 
Cassany es un verdadero experto en la enseñanza de las lenguas y, en este caso, manifiesta que también lo es en los nuevos recursos que van surgiendo a través de internet para facilitar dicha enseñanza.
El libro, desde luego, resultará muy útil para quienes se dedican a la enseñanza en general. A mí me ha gustado en la medida en que me ha hecho tomar contacto y enterarme de un montón de posibilidades nuevas para facilitar la tarea de la escritura. El libro tiene dos partes claramente diferenciadas: en la primera, más teórica, se plantean los principales cambios que se están produciendo en esta era digital para, en la segunda, centrarse más en la enseñanza ofreciendo multitud de medios puestos al alcance a través de internet. Aporta, además, unos cuadros muy prácticos en los que se resumen estos nuevos medios.
Si yo siguiese en la enseñanza realmente me asustaría ante la ingente tarea que tendría que acometer para ponerme mínimamente al día, pero veo que por un lado hay profesores que se van incorporando poco a poco aunque, eso sí, también hay otros a los que les resultará ya muy difícil hacerlo (sería mi caso de no haberme jubilado).
Al final del libro, en la página 269 aparece la siguiente idea: “Como sugieren muchos educadores, es la primera vez que debemos educar para un futuro que ignoramos cómo será”. Da un poco de miedo pensarlo pero es evidente que así es y será. Aquí mi preocupación es si podré resultar de alguna ayuda para el aprendizaje de mi hijo de 3 años.
Libro muy recomendable para profesores o gente interesada en las nuevas tecnologías.

Daniel Cassany, En-línea. Leer y escribir en la red

La extrema-derecha y el IRPF

Me tomo una vez más la libertad de copiar a José María Izquierdo. Merece le pena
 
EL AFAMADO MUSEO EL OJO IZQUIERDO
(Documentos y testimonios de la vida en las cavernas)
 
“Se oía esta pasada semana a algunos economistas afirmar que, en contra de lo que viene haciendo desde que llegara al poder el Gobierno del Partido Popular, sería buena una bajada del IRPF a un tipo único del 18%. Ayn Rand los calificaría, sin duda, como los peores enemigos del capitalismo, puesto que, presumiendo ser sus partidarios, defienden mantener aquello que resulta vital para su liquidación. El IRPF es un impuesto netamente ideológico, el más ideológico de todos, que castiga el esfuerzo, el trabajo y, por tanto premia el no dar palo al agua (…) Pedir la bajada del IRPF supone legitimar el expolio de las clases medias. ¿A alguien se le ocurriría acaso pedir “un poco menos de robo”? Lo que hay que hacer con el IRPF no es bajarlo: es derogarlo.
“Además, como afirman las voces que empiezan a escucharse cada vez más en Europa –incluso en la ruinosa Francia–, hay que hacerlo cuanto antes, puesto que el IRPF es el pilar sobre el que se asienta la oligarquía, el Estado-policial. Lo que empezó por ser un impuesto británico excepcional y temporal –jamás un impuesto es temporal; siempre que se impone, se queda– para momentos de postguerra, ha devenido en el arma perfecta del consenso socialdemócrata europeo contra el pueblo (…). Liquidar el IRPF sería liquidar la socialdemocracia. Por eso ni PP ni PSOE están por la labor”.
 
Almudena Negro. La Gaceta, 14 de mayo de 2013.

martes, 14 de mayo de 2013

La primera novela de Némirovsky



A raíz del éxito que supuso la publicación de la Suite francesa, se está publicando toda la obra de la autora, eso sí, de una forma bastante desordenada al menos desde el punto de vista cronológico. Le toca ahora a la que fue su primera novela aunque la segunda en ser publicada en forma de libro.
El malentendido es una historia de amor y desamor ,o mejor, de desencuentro. Como es habitual en la autora, bien escrita, con personajes bien caracterizados y que te lleva a leerla de un tirón ya que también, como casi siempre, tiene una reducida extensión, 160 páginas. Realmente, ha habido momentos en que me parecía más una novela rosa que otra cosa, pero no sé qué tiene esta autora que es capaz de sacar petróleo de situaciones de ese tipo, por lo que al final la he leído con gusto y metiéndome en la historia.
Dejo aquí un enlace de un encendido seguidor de la escritora que hace un comentario más completo.
Irene Némirovsky, El malentendido

lunes, 13 de mayo de 2013

Insistiendo en lo que es el progresismo

Hace algo más de dos años que publiqué esta entrada en el blog porque había una avalancha de textos críticos sobre el término hechos, además, de forma desabrida y zafia. Hoy ha remitido bastante seguramente debido a la caída del principal partido de la oposición y del zapaterismo, ambos principales objetos de las burlas, pero creo que sigue teniendo interés plantear estas cuestiones cuando la crisis no sólo no disminuye sino que está afectando a todos los sectores e instituciones del país.
Lo publico tal y como lo hice en su momento y al final introduciré algunas consideraciones nuevas.


“hay esperanza, siempre y cuando, eso sí, que esos muchachotes ignorantes de la progresía abyecta y socialista nos abandonen cuanto antes”. (Carlos Dávila en La gaceta. Extraído de El ojo izquierdo, 23.12.2010)


“¿Y qué es ser progresista, hijo mío? ¿Decir que de los 4 millones de parados tienen la culpa la Banca y el PP? ¿Estar en contra de la pena de muerte... en China, pero a favor del aborto y la eutanasia en España? ¿Decir a cada paso esa imbecilidad de ‘ciudadanos y ciudadanas’? ¿Defender la dictadura de Cuba? ¿Quitar los crucifijos? ¿Prohibir los toros? Ah, y se me olvidaba lo principal: ¿negar la religión... católica, que no el Islam? Porque los progresistas, hijo, decís todos que sois agnósticos o ateos, pero gracias a vuestro carné vivís como Dios. (Antonio Burgos. Extraído de El ojo izquierdo 26.01.2011) “

“(…) el acceso desigual a todo tipo de recursos-desde los derechos hasta el agua-es el punto de partida de toda crítica verdaderamente progresista del mundo”. (Tony Judt, Algo va mal)



Venimos asistiendo desde hace ya tiempo a un ataque continuado por parte de determinados medios de la derecha que se centra, sobre todo, en menospreciar, insultar y descalificar el término progresismo y lo que para ellos supone. Utilizan la caricatura y, salvo en contadísimas excepciones, lo que dicen es tan disparatado que no merece la pena perder el tiempo contestando. Más arriba pongo dos ejemplos de su forma de tratar el tema por dos de los “mejores” representantes de esa actitud. Por cierto, suelen autocalificarse de liberales cuando no son ni siquiera conservadores. Se trata más bien de alguna especie de cavernícolas.
Por eso me ha parecido conveniente expresar lo que, al menos para mí, supone dicho término.

Comenzaré utilizando el diccionario de la RAE.

Progreso: Acción de ir hacia adelante. Aquello que se adelanta, anticipa o aparece en primer término.
Progresista: Dicho de una persona, de una colectividad, etc. Con ideas avanzadas, y con la actitud que esto entraña.
Avanzado,da : Que se distingue por su audacia o novedad en las artes, la literatura, el pensamiento, la política, etc

Así pues, en síntesis, el progresismo sería un conjunto de ideas y actitudes que implican una novedad en los distintos campos de la sociedad y que hacen que ésta vaya hacia adelante. Nos topamos aquí de nuevo con otro escollo porque, ¿en qué consiste ese ir hacia adelante? Volveré sobre ello, aunque si tuviera que contestar ahora mismo a esa pregunta, yo diría que ir hacia adelante consiste en ir cada vez a mayores cotas de libertad, igualdad y solidaridad, sin que el aumento en uno de estos conceptos signifique una disminución significativa en otro.

Voy a plantear en qué creo yo que consiste el progresismo en distintos aspectos.

En primer lugar, en la política. Existió históricamente el partido liberal-progresista y, de alguna manera, el progresismo actual consiste en seguir su huella aumentando permanentemente las cotas de derechos y libertades. Las constituciones actuales de los países democráticos recogen una amplia panoplia de ambos, pero surgen nuevas posibilidades de ampliación. Por ejemplo, la opción del matrimonio entre personas del mismo sexo, mayores facilidades para practicar abortos, etc. Además, para el progresismo actual la democracia no es un sistema acabado de una vez por todas. Por una parte, es un sistema de contrapesos y hay que estar buscándolos y poniéndolos en marcha constantemente (1) y, por otra, se trata de un sistema que admite diferentes cotas de participación de los ciudadanos, por lo tanto el progresismo debe buscar ampliarlas permanentemente.
Hasta aquí podríamos decir que no hay ninguna diferencia, en lo que a la política se refiere, entre un liberal y un progresista. Éstas surgen cuando se valora la posible intervención del Estado; necesaria en multitud de aspectos para un progresista y cuanto menor mejor para un liberal tradicional.
Así, la existencia del llamado Estado del bienestar es algo que se está poniendo en cuestión en los últimos tiempos. Si no se consideran la educación y la sanidad como un servicio público, es lógico que se piense que deben ser actividades privadas que cada cual debe buscar la mejor forma de satisfacer.(2) Quienes, por las circunstancias que sean, tengan problema para hacerlo o, directamente, no puedan, allá ellos. Aquí radica la principal diferencia entre ambas ideologías; en el tema de la igualdad y la solidaridad.

En segundo lugar, en la economía. Es quizás, aparentemente, donde aparece de forma más clara la idea del progresismo. Todo aquello que suponga mayor crecimiento económico debería considerarse progresista pues significa un avance (ese ir hacia adelante del que hablaba más arriba). Visto así, desde la revolución industrial hasta hoy, la economía no ha hecho otra cosa que crecer de forma cada vez más acelerada y, por lo tanto, se ha producido un progreso económico mundial.(3) Ahora bien, ¿repartido igualmente a lo largo del globo? O, por decirlo en términos más precisos, ¿ha sido necesario el estancamiento de unos para el avance de otros? Me refiero, claro está, a la idea muy extendida de que para que se haya producido ese desarrollo de una parte del mundo, ha sido precisa la explotación de otra parte a través, principalmente, del bajo precio pagado por sus materias primas o por su mano de obra. Vemos, pues, que incluso en este tema no es oro todo lo que reluce. Sí creo, no obstante, que se puede hablar de que ha habido un crecimiento económico generalizado, dicho de otra forma, hoy la tarta para repartir es mucho mayor y crece constantemente, el problema surge en la justicia del reparto de esa tarta.
Desde el punto de vista de la igualdad y la solidaridad es evidente que tal situación no puede satisfacer a una persona progresista. ¿Cómo se puede corregir esa desigualdad? ¿Lo hará el funcionamiento del mercado? ¿Será precisa la intervención de organismos internacionales? ¿Es imposible corregirla de verdad? En este punto hay que hacer entrar en liza otros temas objeto de fuerte controversia como: libertad de mercado, intervención del estado, ayuda a los países no desarrollados, etc.
Resumiendo lo dicho hasta ahora. Ha habido un fuerte crecimiento económico con un reparto desigual. El pensamiento progresista critica esta situación y debe buscar alternativas aunque puedan resultar dolorosas. ¿De dónde procede ese dolor? Si como afirmé en una nota anterior publicada en este blog,(4) para mejorar la situación de unas zonas del mundo, hay que empeorar en otras, es obvio que estamos en una de las que deberá hacerlo y, por lo tanto, habrá un retroceso en la situación social de los trabajadores y aún así, defender que esto suceda lo considero una actitud progresista por lo que supone de igualdad y solidaridad.

En tercer lugar, en lo que se podría llamar ámbito sociocultural. Éste abarca un amplio abanico de temas que pueden ir desde las políticas culturales propiamente dichas hasta, por ejemplo, la política religiosa, pasando por las costumbres y tradiciones. Aquí la libertad es una vez más la clave de una actitud progresista, pero entendiendo la libertad en el sentido restrictivo de que el ejercicio de la mía no puede privar que otro ejerza la suya. Pondré algún ejemplo. La existencia de la eutanasia como derecho me permite poder practicarla sin que por ello afecte a la libertad de otro para no hacerlo; la presencia de crucifijos en las aulas es una muestra de libertad para los creyentes, pero afecta a aquellos que no lo son.
Dentro de este apartado se puede hablar también de un controvertido tema en el que es muy difícil poder situarse con claridad. Me refiero a todo lo que tiene que ver con políticas inmigratorias y sus correspondientes polémicas: apertura o cierre de fronteras, multiculturalidad o integración, derechos sociales a los ilegales o no,…
Está claro que una política de igualdad supone que derechos sociales como la educación y la sanidad se deben extender a quienes habiten el país sea cual sea su situación legal. Asimismo, el país debe permitir la entrada de aquellos que sean precisos para trabajar o, en otro caso, para producir una unificación familiar. Esto no supone la total apertura pues tampoco favorece la situación de los inmigrantes que haya un exceso exagerado de ellos. Sobre la polémica, multiculturalidad o integración, creo que es preferible la segunda siempre que no suponga la necesidad de abandonar todas sus costumbres y tradiciones y, desde luego, que se haga de forma voluntaria y sin presiones. En este sentido, la tolerancia basada en el respeto y la valoración de lo ajeno es fundamental.



Para concluir, expondré en unas pocas frases a modo de resumen lo que considero progresista y los que no.

Sería así progresista:
. Defender la labor redistributiva del estado a través de los impuestos progresivos y el gasto social.
. Estar a favor de la ampliación de las libertades y derechos individuales.
. Favorecer la participación de los ciudadanos en la toma de decisiones a todos los niveles.
. Preferir el internacionalismo, cosmopolitismo, universalismo,…a cualquier forma de nacionalismo, sobre todo si se trata de uno estatal.
. Pensar que muchas acciones actuales pueden tener graves repercusiones en el futuro y, en consecuencia, prestar atención a la responsabilidad intergeneracional. (Aquí se incluirían desde el tema del endeudamiento público hasta el cambio climático o los problemas ecológicos en general).

No lo sería en cambio:
. Defender un proteccionismo de la economía “nacional” que suponga el cierre a productos procedentes de lugares del mundo donde se produce más barato.
. Poner la razón de estado por encima de otras consideraciones.
. Ocultar informaciones relevantes a los ciudadanos en ara del “interés nacional”.
. Considerar la democracia representativa actual como la forma más desarrollada de democracia.

Para finalizar algo que no por obvio hay que dejar de mencionar: Ni todos los progresistas están afiliados a partidos como el PSOE o Izquierda Unida, ni todos los afiliados a ambos son progresistas, o dicho de otra manera, de izquierdas.





(1).Así, por poner un ejemplo concreto de España, debería evitarse la primacía tan grande que tienen las mayorías ganadoras de las elecciones en: nombramientos de las mesas del Congreso y Senado, elección de representantes en el Consejo del Poder Judicial y del Tribunal Constitucional, etc.

(2).Al mismo tiempo, existen autollamados liberales que defienden la existencia de televisiones pública autonómicas, por ejemplo en Madrid, con nada menos que tres canales.

(3).Es interesante observar lo poco o nada que se utiliza hoy la distinción entre crecimiento y desarrollo, cuando era clave en los años sesenta o setenta en cualquier escrito de economía.

(4).A ello dediqué hace unos meses dos notas en este mismo blog, Efectos (in)deseados de la actual crisis económica.

Publicado en febrero de 2011, ese mismo año se produjo el 15M por lo que se pusieron de moda algunas cuestiones que menciono.
Quisiera matizar algo de lo que afirmo al comparar liberal y progresista hablando de la política. Creo que lo correcto hubiera sido hacerlo entre demócrata y progresista, pues democracia implica división de poderes mientras que liberal no. En este sentido lo que relaciono en la nota 2 me parece un elemento fundamental del cambio que se debería producir para que el poder, que por otra parte es inevitable que exista, se reparta y difumine el máximo posible.
Cuando al hablar de economía planteo la necesidad de que unos, los países ricos, empeoren para que otros puedan mejorar, creo que estoy defendiendo lo que, hoy por hoy, debería diferenciar a un progresista, esto es, el análisis económico a nivel mundial y la consiguiente defensa de un comercio cuanto más libre mejor para que puedan beneficiarse aquellos países competitivos que, en multitud de casos, son los menos desarrollados. Sea como fuere, el caso es que se está produciendo una redistribución de las rentas a nivel mundial desde el llamado mundo desarrollado hacia lugares hasta hace poco muy deprimidos. (En otro momento me gustaría tratar lo sucedido en Bangladesh con la caída de un edificio convertido en gran fábrica y lo que se ha dicho en Europa sobre el tema).
Es evidente que el tema da para mucho más, pero siempre procuro en las entradas del blog ser lo más escueto posible porque sé lo difícil que resulta leer textos largos en el ordenador. En todo caso, espero haber despertado algún interés y alguna respuesta crítica sobre mis opiniones.




domingo, 12 de mayo de 2013

Novela inédita de ¡Joseph Roth!



Gratísima sorpresa encontrarse hace unos días con la noticia de la edición de esta novela inédita en castellano de Roth. Apareció hace ya tiempo en el blog en la sección de mis autores favoritos y es que hubo una época en la que leía todo lo que conseguía de él hasta completar todo lo traducido. Pasados los años, la editorial Acantilado ha editado algunos relatos que desconocía y que he comentado en otras entradas. Sin embargo, no esperaba ni podía imaginar que quedase una novela por traducir tan interesante y conseguida como ésta.
Habla del Napoleón hombre, de su vuelta hasta el destierro definitivo, pero también del amor de una trabajadora de palacio enamorada del emperador y de su matrimonio con un zapatero polaco que resulta un personaje curioso y entrañable. Todo ello con el estilo de siempre, con su cuidada prosa en este caso un tanto más poética que en otras ocasiones, con sus bellas descripciones tanto del exterior como de los sentimientos, con unas extensas enumeraciones, sobre todo al principio del libro, en las que demuestra su dominio del idioma. En fin, una vez más un gran Roth.
Como curiosidad he de añadir que aunque no trata en este libro sus temas tradicionales como el mundo judío o la añoranza del imperio austro-húngaro, no puede evitar alguna alusión como por ejemplo estas frases de la página 144: “Ya no lloraba de emoción por haber encontrado a su hijo, sino por un mundo entero que había muerto, un mundo que ella había creído eterno. Desde que el emperador se había marchado ya no quedaba nada”.
La obra está escrita en 1936, por lo tanto tres años antes de su muerte, en un período muy fecundo tanto por la cantidad como por la calidad de sus textos.
Dejo un enlace de un comentario más detallado y con algunos trozos de la obra.

Joseph Roth, Los cien días

sábado, 11 de mayo de 2013

Más Forges

Hay tantos candidatos que no sé por cuál empezar.

viernes, 10 de mayo de 2013

Gran Forges

Buena serie sobre la televisión

Aaron Sorkin es el creador de esta serie del año 2006 que yo desconocía. Es un claro precedente de The Newsroom cuya primera temporada han puesto hace poco. Diálogos inteligentes y complejos, muy buena realización y temas interesantes (religión, libertad de expresión, crítica política, etc). En fin, serie recomendable.


Series musicales para niños

Acabo de descubrir la serie Little Einsteins que a mi hijo le encanta. Son dibujos animados con fondo de música clásica y enseñando el sonido de los diferentes instrumentos. Antes, el niño ahora tiene más de tres años, le había gustado Baby Einstein que tiene las mismas pretensiones pero no usa la animación sino técnicas más básicas.
Dos series espléndidas para acercar la música clásica a los niños.

miércoles, 8 de mayo de 2013

Algunas citas de las últimas lecturas

Amor
 
Aún le quiero, si amar es sentirse derretir de placer al solo gesto de una mano, admirar sin reserva, compartir en secreto unos gustos comunes de los que uno no se atreve a hablar a fin de no delatarse. Marie Vieux-Chauvet, Amor, ira y locura
 
Juventud
 
-No lo sé. ¡Las mujeres de cuarenta años se resignan tan fácilmente! Nosotros los jóvenes tenemos que protestar, aunque sea para nada. Tal vez porque nuestras fuerzas están intactas aún, porque la vida todavía no nos ha machacado. Aunque no ignoremos que es dura, tenemos ganas de afrontarla, ver hasta dónde puede llevarnos, aunque no sea más que para medir nuestras fuerzas. ¿Lo comprendes?
Marie Vieux-Chauvet, Amor, ira y locura
 
Profesor
 
Me aterra la posibilidad de terminar como profesor de instituto. Es un destino peor que la música country.
Binyavanga Wainaina, Algún día escribiré sobre África
 
Dinero
 
Si Lisa se mostraba indiferente algo, era al dinero y lo que se podía conseguir con él. Según Herbert, la indiferencia por lo material era un privilegio que los pobres recibían gratis, mientras que los ricos más ricos lo conseguían con muchísimo dinero.
Léa Cohen, La estratagema
 
Revolucionario, sacrificio
 
Las personas que están dispuestas a sacrificar su propio bienestar por un noble ideal probablemente acabarán exigiéndoles un sacrificio parecido a otros no tan dispuestos a hacerlo. Un sistema político que no puede funcionar sin mártires es un sistema político malo y destructivo.
Heda Margolius Kovály, Bajo una estrella cruel. Una vida en Praga (1941-1968)
 
Masas, manifestación
 
Toda la vida me había resultado difícil identificarme con un movimiento. Me daban escalofríos las multitudes y sus consignas a voz en grito.
Heda Margolius Kovály, Bajo una estrella cruel. Una vida en Praga (1941-1968)

lunes, 6 de mayo de 2013

Inagotable Montalbano


 
Parece mentira que después de tantos títulos de la serie, 19 he contado, aún sea capaz Camilleri, cercano ya a los noventa años, de inventarse una nueva historia que, además, se sale un tanto del esquema habitual.
Para los que como es mi caso seguimos a Montalbano con absoluta dedicación, el libro no ofrece grandes novedades: diálogos rápidos, cortos, precisos, humorísticos a veces; una relación amorosa del protagonista que dura desde siempre y no culmina nunca; unas comidas copiosas de platos apetitosos y bien regados; y una trama bien construida con cierto margen para la sorpresa.
En fin, Montalbano en estado puro, entretenimiento del bueno. Esperando ya la próxima aparición del comisario más fértil y comilón de los últimos tiempos.

Andrea Camilleri, La búsqueda del tesoro

domingo, 5 de mayo de 2013

Artículos interesantes

Soledad Gallego hace una interesante reflexión sobre la idea de respeto. Totalmente de acuerdo con ella, de hecho hace tiempo que no respeto no sólo a don Mariano, sino a muchos otros (incluyendo a don Alfredo).
 
Josep Ramoneda se manifiesta en contra del pacto y también estoy de acuerdo con sus argumentos.
 
Elvira Lindo da una peculiar visión de la crisis al relacionarla con la infancia.

Un libro con contenidos muy desiguales




El libro recoge un irregular conjunto de escritos de la primera mitad de los sesenta (aunque uno de los fallos del libro es no poner fecha a ninguno). La mayoría son de creación literaria y no reportajes a pesar de que se tiene a Soutehrn como uno de los creadores del “nuevo periodismo”.
Particularmente me han interesado un par de los de creación y otro par de los reportajes, el resto no, y el libro se compone de veinte. Seguramente fue muy rompedor en su época, pero leído desde hoy resulta menos novedoso en los temas y, desde luego, en la forma de contarlos que, en varios relatos me ha recordado mucho la gran novela negra de veinte años antes.
Si hace unos días mostré mi cierta decepción con el libro de Joan Didion, lo mismo tengo que decir con éste de Southern. No sé si es que Talese es quien me marca la pauta, pero desde el punto de vista del periodismo me parece que hay bastante distancia con los mencionados.

Terry Southern, A la rica marihuana

viernes, 3 de mayo de 2013

Muy buena novela con la RDA al fondo



 
He disfrutado realmente con la lectura de esta novela a pesar de que a veces me ha costado un poco seguirla (esto es algo que me pasa por mi poca memoria). No es que la estructura sea muy compleja, pero va alternando épocas: años 50, 60, 70, 90 y dos momentos concretos de 1989 y 2001. En cada época sus protagonistas son distintos miembros de la misma familia cuya pequeña historia queda así reflejada a través de cuatro generaciones. Al mismo tiempo, y con no demasiadas informaciones, va retratando cómo era la vida y la situación política en la antigua RDA.
Lo más interesante de la novela es que no sigue la historia de cada personaje de una forma completa, sino que ve dando retazos, escenas cortas de su vida y sus problemas. Nos quedamos así con las ganas de saber más de algunos de ellos, pero la obra gana en fluidez y se centra en los aspectos más relevantes.
Un libro que te mantiene en vilo y que quieres retomar en cuanto dispones de un momento. También hace que me reconcilie un tanto con la literatura alemana contemporánea ya que más de uno de los leídos en los últimos tiempos se me ha caído de las manos.
 
Eugen Ruge, En tiempos de luz menguante. Novela de una familia

jueves, 2 de mayo de 2013

Citas sacadas de las memorias de Buñuel

Memoria
 
Hay que haber empezado a perder la memoria, aunque sea solo a retazos, para darse cuenta de que esta memoria es lo que constituye toda nuestra vida. Una vida sin memoria no sería vida, como una inteligencia sin posibilidad de expresarse no sería inteligencia. Nuestra memoria es nuestra coherencia, nuestra razón, nuestra acción, nuestro sentimiento. Sin ella no somos nada.
Luis Buñuel, Mi último suspiro
 
 Tabaco
 
El tabaco, que casa admirablemente con el alcohol (si el alcohol es la reina, el tabaco es el rey), es un amble compañero con el que afrontar todos los acontecimientos de una vida. Es el amigo de los buenos y de los malos momentos. Se enciende un cigarrillo para celebrar una alegría y para ahogar una pena. Estando solo o acompañado.
El tabaco es un placer en todos los sentidos: de la vista (es bonito ver bajo el papel de plata los cigarrillos blancos, alineados como para la revista), del olfato, del tacto… Si me vendaran los ojos y me pusieran entre los labios un cigarrillo encendido, me negaría a fumar. Me gusta sentir el paquete en el bolsillo, abrirlo, palpar la consistencia del cigarrillo, notar el roce del papel en los labios, gustar el sabor del tabaco en la lengua, ver brotar la llama, arrimarla, llenarme de calor.
Luis Buñuel, Mi último suspiro
 
 
Literatura
 
“Todo ser que no tenga en sí un fondo de amor apasionado por las mujeres, las flores, los objetos de arte, el vino o lo que sea, todo aquel que no tenga una veta un poco desquiciada, todo ser perfectamente equilibrado, nunca, nunca, nunca poseerá talento literario.”
Edmond de Goncourt citado en
Luis Buñuel, Mi último suspiro
 
Nacionalismo
 
Al himno estadounidense siguió La Marsellesa y yo puse ostensiblemente los pies sobre la mesa. Un joven se acercó y me dijo en inglés que aquella actitud era abominable. Yo le contesté que nada parecía tan abominable como los himnos nacionales.
Luis Buñuel, Mi último suspiro
 
Información
 
Detesto  la proliferación de la información. La lectura de un periódico es la cosa más angustiosa del mundo. Si yo fuese dictador, limitaría la prensa a un solo diario y una sola revista, ambos estrictamente censurados. Esta censura se aplicaría tan solo a la información quedando libre de opinión. La información-espectáculo es una vergüenza. Los titulares enormes -en México baten todos los récords- y los sensacionalistas me dan ganas de vomitar. ¡Todas esas exclamaciones sobre la miseria para vender un poco más de papel! ¿De qué sirve? Además, una noticia expulsa a otra.
Luis Buñuel, Mi último suspiro
 
Muerte, eutanasia
 
Igualmente atroz y, quizá peor, me parece la muerte largo tiempo diferida por las técnicas médicas, esa muerte que no acaba. En nombre del juramento de Hipócrates, que coloca por encima de todo el respeto de la vida humana, los médicos han creado la más refinada de las torturas modernas. La supervivencia. Eso me parece criminal. (…)Que se nos deje morir, llegado el momento, e, incluso, que se nos dé un empujoncito para partir más aprisa.
Luis Buñuel, Mi último suspiro
 

miércoles, 1 de mayo de 2013

Interesante crítica a los economistas



Yerran las previsiones, Han perdido el contacto con la realidad, Han creído demasiado en el dios mercado, Tienen demasiado poder, Son incapaces de comunicar y Han dejado de soñar. Estos son los diez cargos que el autor hace a los economistas y que constituyen los seis capítulos del libro.Los tres primeros me parecen los más interesantes. En los otros pesan demasiado los ejemplos de Italia que hace que, en algún momento, se pierda uno entre tanto nombre de gente por otra parte desconocida salvo rara excepción.
No sólo es una crítica a los economistas, sino a todos los que no previeron la crisis actual y han colaborado por activa o pasiva a que se produzca.
El autor es un periodista italiano del diario La Repubblica que explica los temas con bastante claridad. Eso sí, no aporta gran cosa al conocimiento de lo que ha pasado; además, el texto es de 2009 con lo que ha quedado un poco desfasado.
Lo más relevante es esa descalificación de unos profesionales tan bien pagados como incompetentes (bueno, incompetentes para los demás, pues ellos se han enriquecido lo suficiente).
 
Roberto Petrini, Proceso a los economistas