Con Piñeiro me pasa lo mismo que con Yasmina Khadra,
una vez que veo un libro suyo nuevo en la librería lo compro sin ni siquiera
leer la contraportada. Mi fe en ambos se basa en que nunca me decepcionan. Será
mejor que los anteriores o no, más interesante o no, pero siempre tienen algo
que me llama la atención.
Creo que de Piñeiro he comentado todo lo que se ha
publicado en nuestro país. Desde luego he visto que en el blog hay muchos
libros suyos y que en el año 2018 hubo una pequeña inflación, algunos
seguramente publicados antes.
Aunque se suelen catalogar sus libros como novela
policiaca o novela negra, y es cierto que muchos responden perfectamente a esa
catalogación, en bastantes hay elementos suficientes para que sean algo más que
eso. Este es el caso tan claro del que ahora comento que entre las etiquetas no
he puesto la de novela negra.
La anécdota o historia del libro es muy sencilla. Una
mujer, Juliana, cae desde la terraza de un piso en Buenos Aires propiedad de un
conocido empresario que también se encontraba en el piso. A partir de ahí su
hermanastra por parte de padre, Verónica, la protagonista de la novela, intenta
averiguar las causas de la caída. En la investigación colabora una amiga con la
que ganó un premio Rey de España de investigación periodística. Por otra parte,
Pablo, el marido de Verónica, un escritor de escaso éxito, también muestra
interés en el tema.
Pues bien, con esta sencilla historia y estos pocos
personajes, Piñeiro compone una novela realmente magnífica en la que, por un
lado, penetra en los rincones más oscuros de la prostitución de lujo y sus
conexiones con el poder tanto económico como político, así como muestra los claroscuros del periodismo, y, por otro lado, hace un
verdadero alarde de estructuración en las tres partes en que divide la novela,
estructura de la que no debo ser más explícito para no destripar algunas de las
sorpresas, aunque sí pudo decir que la segunda es muy original y en ella
aparecen desde notas de prensa, a documentos judiciales pasando por grabaciones
de los protagonistas.
Creo que no exagero si digo que es la novela de la
autora que tiene una arquitectura más elaborada y que resulta lo más
interesante de una obra que tiene alicientes de todo tipo. Además, creo que hay
que mencionar el enorme mérito que supone mantener el interés del lector a lo
largo de 378 páginas gracias a un suspense muy bien montado.
Muy recomendable como todas las de esta magnífica
escritora argentina.
Claudia Piñeiro, La muerte ajena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario